El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, anunció este lunes un toque de queda desde las 23:00 a las 05:00 horas (locales), a raíz de las violentas protestas desatadas el fin de semana por la muerte de George Floyd, ciudadano afroamericano de 46 años, a manos de la policía en Minneapolis.
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Siguiendo el ejemplo de otras grandes ciudades de Estados Unidos, De Blasio dijo que la decisión fue adoptada tras una conversación con el gobernador Andrew Cuomo.
"Apoyamos las protestas pacíficas", pero a raíz de la violencia y saqueos de los últimos días, "por la seguridad de todos, hemos decidido implementar un toque de queda en la ciudad de Nueva York esta noche", escribió el alcalde neoyorquino en Twitter.
Al menos 140 ciudades estadounidenses organizaron manifestaciones contra la brutalidad policial y el racismo el domingo, según la prensa local. Se impuso el toque de queda en decenas de ellas, incluido en Los Ángeles, Houston y Washington.
El alcalde y el gobernador de Nueva York anunciaron en un comunicado que la policía duplicará su presencia en las calles para ayudar a prevenir la violencia e impedir destrozos y saqueos.
"Apoyo y protejo las protestas pacíficas en esta ciudad" a raíz de la muerte de Floyd, dijo de Blasio en el comunicado.
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"Las manifestaciones que hemos visto han sido generalmente pacíficas. No podemos dejar que la violencia socave el mensaje de este momento. Es demasiado importante y el mensaje debe ser escuchado".
Se mantienen las protestas
Las protestas, en tanto, continúan a lo largo del país.
Unos mil manifestantes protestaban pacíficamente este lunes de tarde en Times Square, aplaudiendo y gritando "George Floyd, George Floyd" y "Black Lives Matter" (Las vidas negras importan) frente a policías equipados con uniformes antidisturbios.
En Washington, autoridades también anunciaron su decisión de prolongar y aumentar cuatro horas diarias el toque de queda impuesto en la ciudad tras los disturbios registrados la noche del domingo que alcanzaron incluso los alrededores de la Casa Blanca.