Los habitantes de un pequeño barrio en el oeste de Argentina se han visto sorprendidos por un supuesto hecho “paranormal” registrado en una plaza local.
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Se trata de un extraño fenómeno suscitado en un parque para niños del barrio Ferroviario de Maipú, en la ciudad de Mendoza, donde uno de los columpios, instalados allí para que los menores jueguen, comenzó a moverse, inexplicablemente, por sí solo.
Incrédula ante lo que estaba atestiguando, una mujer que transitaba por el lugar decidió grabar con su teléfono celular la extraña manifestación.
“Estoy acá en la plaza. No hay nadie, ¡nadie en la plaza! Estacionamos acá”, explica la persona en la grabación. “¡Mirá se está hamacando sola esa hamaca (columpio)! ¡No hay nadie y se está hamacando sola!”, dice sorprendida.
En el video se observa cómo el columpio se mece hacia adelante y hacia atrás, sin que nadie lo esté empujando. Además, el clip deja en claro que el viento nada tiene que ver con el extraño movimiento del juego, ya que las hojas de un árbol que aparece en primer plano no se mueven. Además, otros dos columpios ubicados justo al lado permanecen quietos.
De acuerdo con el Clarín, el misterioso hecho tuvo lugar en el espacio verde Capitán José Daniel Vazquez (bautizado así en honor a un piloto caído en Malvinas), entre las calles El Norteño y Virgen de Lourdes.
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Tras la difusión del video, en las redes sociales surgieron versiones que ligaban el extraño episodio con un hecho de índole sobrenatural.
El suceso recordó, además, el emblemático caso de “las hamacas de Firmat”.
Durante años, la ciudad santafesina de Firmat fue escenario de un misterio similar que incluso trascendió las fronteras argentinas: en 2007, un niño descubrió que uno de los tres columpios de la plaza Manuel Belgrano se movía solo.
Desde entonces, varios vecinos pudieron grabar el extraño fenómeno en repetidas oportunidades, naciendo así la leyenda.
Según los propios habitantes de la ciudad, citados por el Clarín, el “responsable” del hecho habría sido el “fantasma” de un niño que murió en un accidente, y cuyo columpio favorito era, precisamente, que se movía solo.
El misterio fue tal que en 2011 llevó a los productores del programa estadounidense “Fact or Faked” (“Realidad o Montaje”) a visitar la ciudad, quienes lograron explicar el fenómeno: el columpio era más ancho y, por lo tanto, embolsaba el aire de diferente manera. Esto provocaba que, a determinada velocidad, se moviese a un ritmo diferente al de los otros dos.
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