Tenía hambre. Robo una memoria USB y la quiso vender a Q5. Solo quería comer.
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Ese es el resumen de los actos de Óscar Ordóñez López, de 14 años, quien el 16 de agosto fue llevado por la Policía al Juzgado de Paz de turno de Huehuetenango, en donde pasó la noche.
La Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) lamentó que al niño lo hayan llevado al juzgado sin el acompañamiento de esa entidad o de la Procuraduría General de la Nación (PGN).
El juez de paz de turno decidió enviarlo a un hogar privado en donde le darán abrigo y protección.
¿Quién es el niño?
Óscar es un niño de 10 años, pero con apariencia de siete, debido a la desnutrición que padece.
Su padre es alcohólico y su madre es una mujer pobre que vive en una pequeña casa en una de las aldeas de la cabecera de Huehuetenango, según el medio de comunicación “Prensa Comunitaria”.
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No es la primera vez que Óscar se ve involucrado en una situación similar.
En noviembre de 2018, el niño se robó una manzana de un puesto del mercado La Terminal, de la aldea Palajachuaj, de San Sebastián, en Huehuetenango.
Al ver la situación, un grupo de patrulleros lo golpeó y como consecuencia de la paliza, fue trasladado al hospital.
Por ese caso, fue capturado un hombre a quien identificaron como "Zapatón".
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