Las conclusiones de la reunión que sostuvieron varios jueces que integran la Asociación de Jueces por la Integridad y los magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) el pasado miércoles 20 de marzo se resumen en dos aspectos:
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- Que el presidente de la CSJ, Nester Vásquez Pimentel, nunca informó sobre las quejas por la variación en las medidas de seguridad de varios juzgadores.
- Y que fue el titular del Organismo Judicial (OJ) quien ordenó el desarrollo de una campaña para defender la gestión de Roberto Mota Bonilla al frente dela Dirección de Seguridad Institucional.
Así lo informaron varios asistentes a la sesión, quienes pidieron no ser identificados.
El compromiso al cual se llegó consiste en que durante una sesión de pleno de la CSJ se exigirá a Vásquez Pimentel una respuesta acerca de por qué no trasladó la información referente al tema.
Exponen preocupación
El pasado martes 19 de febrero los jueces Haroldo Vásquez, presidente de la agrupación, Miguel Ángel Gálvez, Erika Aifán y Carlos Ruano se reunieron con Vásquez Pimentel para exponerle su preocupación por las modificaciones en las medidas de seguridad que mantenían.
Ese día también exigieron la destitución de Mota Bonilla por no cumplir con el perfil que debía presentar la persona encargada de la seguridad en el OJ, entre otros aspectos.
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Vásquez Pimentel se comprometió a desarrollar las acciones necesarias para hacer que la situación retornara a la normalidad.
Sin embargo, el presidente del OJ dio instrucciones al área de Auditoría que se realizará una investigación para determinar la veracidad de los señalamientos de los juzgadores.
En el informe elaborado por los auditores se indicó que Mota Bonilla debía mantener mayor y mejor comunicación con los jueces para evitar que estos se encontraran en situaciones de vulnerabilidad.
Dicho informe se hizo público el pasado martes 12 de marzo, en horas de la noche. Antes de eso Vásquez había dado a conocer que el funcionario señalado ya no era trabajador del OJ porque ese mismo día había presentado su renuncia a Recursos Humanos.
Otro hecho que ocurrió ese martes fue la divulgación de una orden de captura girada en contra de Mota Bonilla por delitos de violencia contra la mujer.
Durante casi 48 horas fue desconocido el paradero del exfuncionario. Fue hasta el jueves 14 de marzo último que acudió de manera voluntaria al Juzgado de Turno de Femicidio para resolver su situación jurídica.
La audiencia finalizó cuando fue ligado a proceso por violencia contra la mujer en forma psicológica y beneficiado con arresto domiciliario.