El presidente del Congreso, Álvaro Arzú Escobar, se pronunció nuevamente en redes sociales con relación a los señalamientos contra su madre, Patricia Escobar de Arzú, por supuestas irregularidades en contratos que le ha brindado la Municipalidad de Guatemala.
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Ayer agradeció “todas las muestras de solidaridad y cariño” que aseguró haber recibido por parte de personas que se “indignaron” por lo que consideró un ataque hacia su mamá.
Mientras que este miércoles aseguró que esa situación solo ha servido para fortalecer a la viuda del exalcalde capitalino, Álvaro Arzú Irigoyen.
“La respuesta que una dama le da a los ataques de patanes y rufianes es más trabajo y más compromiso con los niños”, escribió el legislador en su cuenta de Twitter.
Asimismo, citó un versículo de la Biblia en su publicación. “El Señor derribará la casa de los soberbios, pero afianzará los linderos de la viuda. Proverbios 15:25”, escribió.
Contratos en la MuniGuate
El exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Juan Francisco Solórzano Foppa, denunció las supuestas irregularidades en contrataciones de la comuna capitalina e indicó que esta se encuentra “cooptada” por la familia Arzú.
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Por ello planteó las denuncias el pasado lunes ante el ente recaudador, la Contraloría General de Cuentas y el Tribunal Supremo Electoral.
De acuerdo con el exsuperintendente, Patricia de Arzú cobra Q25 mil mensuales “sin hacer nada”, por medio de una plaza que se le otorgó bajo el renglón 189.
El portavoz de la municipalidad, Carlos Sandoval, ha rechazado los señalamientos de Solórzano y los ha calificado como “espurios”.
Según él, la viuda de Arzú presta servicios técnicos asesorando a la Secretaría de Asuntos Sociales con todos los programas que ella misma creó y desarrolló, y es una persona “valiosa, que aporta mucho” a la entidad.
Servicios técnicos
El sistema Guatecompras registra dos contratos de Patricia de Arzú con la MuniGuate para la prestación de servicios técnicos.
Uno de julio a diciembre de 2018, por un monto de Q150 mil. Y otro de enero a diciembre de 2019, por Q300 mil.
