Más de 40 muertos dejó un sangriento motín en una cárcel para mujeres cerca de Tegucigalpa, capital de Honduras, informaron autoridades este martes. “Se reportan 41 fallecidas, preliminarmente”, en el Centro Femenino de Adaptación Social, dijo Edgardo Barahona, portavoz policial.
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Las víctimas formaban parte de la mara Salvatrucha, por lo que sospecha que el ataque lo perpetuaron miembros de la una pandilla rival, la mara Barrio 18, indicó Delma Ordóñez, presidenta de la Asociación de Familiares Privados de Libertad, en declaraciones a los medios locales. “El módulo está completamente destruido, fue quemado en su totalidad”, aseguró Ordóñez, quien afirmó que en la prisión hay unas 900 reclusas. El enfrentamiento también dejó cinco heridas, que fueron trasladadas al Hospital Escuela, en Tegucigalpa.
“No vamos a tolerar actos vandálicos ni tampoco irregularidades en esa cárcel. Se autoriza la intervención inmediata con acompañamiento de bomberos, policías y militares, se declara emergencia”, declaró por su parte Julissa Villanueva, viceministra de Seguridad, quien además declaró “emergencia” en la cárcel donde ocurrió el motín.
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— Dra.Semma Julissa Villanueva B. (@villanuevasemma) June 20, 2023
No vamos a tolerar actos vandalicos ni tampoco irregularidades en esta cárcel
Se autoriza intervención inmediata con acompañamiento de bomberos, @PoliciaHonduras y militares, se declara emergencia pic.twitter.com/j7fAIKEijV
Crimen organizado en Honduras
Julissa Villanueva fue nombrada en su puesto después de que varios enfrentamientos en cuatro cárceles registrados en abril dejaran un muerto y siete heridos. La viceministra anunció inmediatamente un plan para controlar las 26 prisiones del país, en las que hay unos 20 mil internos.
El plan incluye un “desarme real a través de registros manuales y electrónicos permanentes en el 100 % de las instalaciones” y “el bloqueo total de la señal telefónica” para que los reos no puedan dirigir acciones criminales desde las cárceles.
Según las autoridades, cabecillas del crimen organizado presos ordenan extorsiones, secuestros, sicariato, operaciones con drogas y otros delitos desde el interior de los presidios.
*Con información de AFP