Lorenzo Alberto Bolaños Sánchez, quien formó parte de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), por medio de una carta informó que renunció al Ministerio Público (MP) e hizo una serie de señalamiento contra la fiscal general, Consuelo Porras.
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“Por este medio quiero comunicarles la razón por la que debí renunciar a mi cargo como auxiliar fiscal de le FECI y sumarme a la larga lista de operadores de justicia, hoy injustamente exiliados por hacer nuestro trabajo con compromiso e imparcialidad”, comienza la carta de Bolaños Sánchez.
Según el exfiscal, “desde 2018, la actual Fiscal General y sus aliados han trabajado para garantizarle impunidad a las redes criminales que debió perseguir”.
“Para las y los fiscales comprometidos con la ley y que nos manejamos de forma independiente de las presiones del poder en el país esto fue el inicio de la persecución que sea acelerado en días recientes. En mi caso fui sometido a una serie de traslados dentro de la misma fiscalía, con el fin único de asegurar que no siguiera conociendo los casos que se encontraban en mi mesa de trabajo”, detalló en la masiva.
El exauxiliar fiscal de la FECI investigó casos como Construcción y Corrupción I y II, así como el hallazgo de Q122 millones dentro de unas maletas que fueron localizadas en una casa de la Antigua Guatemala, caso por el cual fue ligado el exministro de Comunicaciones, José Luis Benito. Aseguró que con esto se truncan los avances que se tenían dentro de dichas investigaciones.
“Como auxiliar fiscal me encargué de las investigaciones de casos de corrupción logrando operativizar varios de ellos, sin embargo, la Fiscal General, además, de no apoyar nuestro trabajo, respaldó a nuestros detractores criminalizando, estigmatizando, deslegitimado y denigrando nuestras funciones creando con esto una fiscalía totalmente disfuncional y temerosa de presentar nuevos casos de corrupción por tener ser perseguidos por esto”, agregó.
Decidió salir de Guatemala
Bolaños Sánchez manifestó que su vida, su integridad física y jurídica se encontraban en riesgo, por lo que tomó la decisión más difícil de su vida, “renunciando al trabajo que tanto valoré y saliendo del país que tanto amo”, puntualizó.
“Me solidarizó y manifiesto mi profunda admiración por mis excolegas que enfrentan hoy a la injusta y vergonzosa persecución encabezada por Consuelo Porras, colegas con quienes compartimos el sueño de una Guatemala diferente. El trabajo por construir una mejor Guatemala les ha convertido en actores incómodos que quieren sacar del camino. Me uno a las voces que instan al pueblo de Guatemala a que luchan por la justicia, valor ineludible en la búsqueda de la paz social”, culmina la masiva.
