Filipinas se convirtió el domingo en el primer país en reportar una muerte relacionada con el nuevo coronavirus fuera de China, profundizando los temores sobre una epidemia mundial.
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La víctima sería un hombre de 44 años, originario de la ciudad de Wuhan (epicentro de la epidemia), quien aparentemente llegó a Filipinas ya contaminado con el coronavirus 2019-nCoV.
"Es el primer reporte de una muerte fuera de china", dijo a la prensa Rabindra Abeyasinghe, representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Filipinas.
El domingo, la Comisión de Salud Pública de la provincia de Hubei reportó 45 nuevas víctimas fatales en las últimas 24 horas, y con ello el número total de personas muertas en el país ya asciende a 304.
En tanto, las autoridades nacionales informaron que el número de casos confirmados ya llegó a 14 mil 380.
Esta primera muerte fuera de territorio chino ocurre en momentos en que varios países anuncian severas restricciones fronterizas para personas provenientes del gigante asiático.
Malestar chino
China, por su parte, criticó la reacción de los países que adoptaron restricciones, alegando que era necesario evitar el "pánico innecesario" con la implementación de "medidas excesivas".
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Por su parte, la OMS advirtió de que las restricciones a la circulación podrían ser contraproducentes durante una emergencia sanitaria, por el riesgo de que perturben la distribución de ayudas y de lastrar la economía de los países afectados.
Numerosos países como España, Francia, India, Alemania, Polonia, Canadá, Colombia e Italia fletaron aviones a China para repatriar a sus ciudadanos o prevén hacerlo pronto.
Cuarentena gigante
Tanto Wuhan como su región, donde habitan unos 56 millones de personas, están prácticamente aisladas del mundo exterior.
Los hospitales de la ciudad están desbordados.
Tras el brote, además, se decidió construir un nuevo hospital con capacidad para mil pacientes, el cual empezará a operar el lunes.
Este domingo, las autoridades anunciaron el aislamiento casi total de la ciudad de Wenzhou, situada en la provincia de Zhejiang y una megalópolis de más de nueve millones de habitantes donde ya se registraron ya 256 casos de coronavirus.
Ahora, los habitantes tienen la obligación de permanecer en sus casas, y casi todo el transporte público fue suspendido.
En otras partes del país, el miedo al contagio se apoderó de los habitantes, recelosos de salir de sus casas y que, cuando salen, lo hacen con mascarilla.
*Con información de AFP
