Familiares de personas que supuestamente fueron afectadas por las labores de la CICIG expusieron sus testimonios ante los diputados que integran la comisión encargada de investigar a esta institución.
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Este jueves 2 de octubre se llevó a cabo la primera audiencia de la sala de trabajo específica que se instaló con el objetivo de verificar los 12 años de trabajo de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
A esta habían sido convocados el Ministerio Público, el Organismo Judicial y la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos; sin embargo, no enviaron representantes.
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Exponen vejámenes
Los primeros en exponer fueron los familiares de Jesús Oliva, quien fue sindicado por el caso IGSS Pisa, y murió en la cárcel Mariscal Zavala en junio de 2018, tres meses antes de que se dictara la sentencia en el juicio.
Aseguraron ser los agraviados y explicaron que Oliva, quien era médico, tenía depresión y por ello se buscaba el beneficio de arresto domiciliario, pero que el Ministerio Público y la CICIG se opusieron pese a su estado de salud.
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También dieron su testimonio el padre de Alfredo Zimeri y la abogada de la familia, quienes denunciaron que sufrió vejámenes a manos de personal de la CICIG.
Zimeri resultó golpeado en el marco de una discusión durante un partido de fútbol en el que participaron funcionarios de la comisión internacional.
Entre quienes se presentaron para escuchar el desarrollo de la audiencia se encontraban las integrantes de la familia Bitkov, señaladas en un caso de supuesta falsificación de documentos. También estuvo en el público el diputado Fernando Linares Beltranena.
Por esta semana las audiencias ya concluyeron y serán retomadas el próximo lunes por la sala específica del Congreso.
