El Ministerio de la Defensa Nacional entregó a la Contraloría General de Cuentas el informe correspondiente a la adquisición de los aviones Pampa III, de fabricación argentina, que se le había requerido.
PUBLICIDAD
El subcontralor del Gasto, César Elías, confirmó que fue el martes a las 14:15 horas cuando se recibió el documento en la Contraloría.
Agregó que este será analizado por el Departamento Jurídico de la Contraloría y que hoy se podría emitir una postura al respecto.
Recomendados
El Secretario General de la Presidencia cuestiona que el MP haya publicado las solicitudes “confidenciales”
¡Intento de robo sale mal! Camión se empotra en una vivienda en zona 1
Fiscalía realiza allanamientos en el Aeropuerto La Aurora por las recientes adjudicaciones
El ente fiscalizador requirió desde la semana pasada al Ejército que le trasladara información sobre el procedimiento que fue utilizado para la compra de las dos aeronaves.
Además, fijó un plazo de 24 horas para la recepción; sin embargo, la cartera castrense solicitó más tiempo, aunque sin indicar cuántos días necesitaba.
En ese sentido, Elías aseguró que el plazo finalizaba a las 14:00 horas de ayer, y de no cumplirse, estaría utilizando las facultades que le competen.
Advirtió que iniciaría un procedimiento para solicitar el expediente a través del Ministerio Público y se empezarían a imponer las acciones que implican la resistencia a la acción fiscalizadora.
Proceso de adquisición
La semana pasada se hizo el cierre de la negociación para adquirir dos aviones tipo Pampa III, que serán asignados a la Fuerza Aérea Guatemalteca.
El Gobierno de Guatemala erogará casi 28 millones de dólares, que incluyen también la capacitación para los pilotos nacionales y repuestos para las aeronaves.
El ministro de la Defensa, Luis Ralda, aseguró que el proyecto será financiado con fondos propios de esa cartera.
Incluso mientras se desarrollaba en Argentina una reunión para concretar la compra, con la participación de los presidentes de ambos países, Jimmy Morales y Mauricio Macri, el Ejecutivo continuaba negando la situación.
Tanto el vicepresidente de la república, Jafeth Cabrera, como el vocero del Ejército señalaban que no se había hecho tal compra.
Al ser cuestionado acerca de por qué se evitó brindar la información hasta que se cerró completamente el negocio, Ralda declaró que los funcionarios respondieron de forma correcta al indicar que no se estaba haciendo ninguna compra, porque no es así, sino que era una “adquisición”.