Don Cipriano Álvarez, el hombre que fue atacado por tigres y que perdió los brazos, fue citado a declarar como sindicado por supuestamente haber causado un incendio.
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Los hechos que el Ministerio Público (MP) imputó este viernes 28 de junio en contra de Álvarez ocurrieron en 2009, de acuerdo con la investigación que fue descrita al juez undécimo penal, José Estuardo Cojulum.
Según la pesquisa, el siniestro se registró en el interior de la finca Santa Marta, ubicada en la aldea El Jocotillo, en Villa Canales.
Los llamas causaron daños materiales y patrimoniales, los cuales fueron valorados en más de Q30 mil.
Al finalizar la diligencia, el sospechoso dijo que no es responsable de los hechos que fueron descritos por el órgano encargado de la persecución penal, razón por la cual acudió al Juzgado para aclarar su situación.
"Al parecer yo fui, pero es mentira lo que él está diciendo. Como le digo, yo podría probar eso. Porque la realidad cuando uno no debe nada, no teme nada. Por eso estoy viniendo", afirmó a periodistas.
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El MP solicitó a Cojulum que se cerrara el caso y que se otorgara a Álvarez un criterio de oportunidad para que solventara su situación jurídica, pero dicho extremo será resuelto por el juez en una audiencia distinta.
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Incendio ocurrió antes de ataque
Don Cipriano Álvarez fue conocido debido a las atenciones médicas que recibió porque dos tigres de un circo lo atacaron y le amputaron los brazos.
Ese hecho se registró en 2018. En ese entonces, el señalado trabajaba como guardián de la finca en la cual se resguardaban los objetos del circo.
Los animales estaban a cargo del hijo de Álvarez, pero este tuvo que movilizarse para cumplir otras obligaciones y los dejó al cuidado de su papá.
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