El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) dio a conocer este martes los detalles del análisis realizado en el caso de la muerte del exdiputado Joaquín Bracamonte y su esposa, la exfuncionaria Zulma Subillaga, que pertenecieron al Partido Patriota (PP).
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El director de la entidad, Fanuel García, indicó que ya se practicaron las necropsias correspondientes a los dos cuerpos y se reveló que fueron proyectiles de arma de fuego los que les causaron la muerte.
Bracamonte, exdiputado al Congreso por el extinto PP, y Subillaga, extitular de la Secretaría Contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas (SVET), fueron localizados sin vida dentro de un vehículo en un sector de la zona 10 capitalina.
Ambos estaban desaparecidos desde el 3 de diciembre. El hallazgo se dio en horas de la madrugada del pasado viernes, y las fiscalías de Delitos Contra la Vida y de la Mujer investigan el caso.
El día en el que fueron encontrados se habló de un posible suicidio en el caso de Bracamonte, y de acuerdo con los primeros resultados del análisis forense, esa hipótesis no se descarta.
En entrevista con Emisoras Unidas, García señaló que se confirmó que el proyectil que le causó la muerte a la mujer, y que fue encontrado en su cadáver, fue disparado por el arma encontrada en la escena del crimen, específicamente dentro del vehículo.
El funcionario señaló que el caso de Bracamonte, no se ha podido establecer si el proyectil que impactó su cuerpo fue disparado con el arma hallada.
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“No podemos decir si esa misma arma causó la muerte del exdiputado porque no se encontró ningún proyectil dentro del cadáver y la Fiscalía tampoco nos ha remitido un proyectil para comparar”, explicó.
¿Pudo ser un suicidio?
Aunque el director del Inacif aclaró que corresponderá al MP aclarar detalles de cómo se dieron las muertes de estas personas, ya hay algunos indicios que marcan que se descarta absolutamente que la muerte de la extitular de la SVET pueda ser un suicidio.
“No es un disparo de contacto ni de corta distancia que haya dejado algunas huellas en particular. Se estima que fue a una distancia mediana o larga”, dijo.
El experto dio a conocer que se considera una distancia no corta si sobrepasa los 50 centímetros. Mientras tanto, cuando se da un disparo cercano, con el arma pegada al cuerpo o a tres o cuatro centímetros de distancia, se pueden identificar rasgos de quemadura o pólvora en el fallecido.
“En el caso de ella evidentemente no es un suicidio, porque tiene el disparo en la región de la cabeza, en la parte posterior, en la zona occipital, es decir, en un área donde no es un típico disparo de corta distancia”, expuso García.
Por el contrario, en el caso del exdiputado el disparo sí es a una distancia corta, lo cual en algún momento podría ser compatible con heridas de suicidio.
“Pero no nos corresponde a nosotros poder afirmar esa hipótesis sino al Ministerio Público, de acuerdo a otros elementos que ellos pudieran tener a la vista, como por ejemplo las (imágenes) captadas por cámaras de seguridad” ubicadas en el sector, manifestó.
Por ahora no ha sido posible determinar si el arma de fuego fue accionada por alguna de las dos personas fallecidas.
Continuarán los análisis
El Inacif aún está pendiente de realizar pericias en el área toxicológica para determinar si hay algunos restos de sustancias que haya podido consumir alguno de los fallecidos.
De igual forma, realizará el cotejo de huellas, pues la Fiscalía localizó una marca dentro del vehículo, así que se deberá establecer si corresponde a Bracamonte o Subillaga, o si en caso es de una tercera persona.
También corresponderá al Ministerio Público establecer si el arma de fuego hallada en el interior del carro pertenecía a alguno de ellos.
