Dos días después de la esperada cumbre entre los líderes de Corea del Norte, Kim Jong-un, y Corea del Sur, Moon Jae-in, el papa Francisco afirmó que acompañaba con sus oraciones "el resultado positivo" de la misma y el "valiente compromiso" de los líderes de ambos países.
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"Acompaño con la oración el resultado positivo de la cumbre intercoreana del viernes pasado y el valiente compromiso asumido por los líderes de las dos partes de realizar un camino de diálogo sincero para una península coreana libre de armas nucleares", declaró el pontífice después de la oración de Regina Coeli.
"Ruego al Señor para que la esperanza de un futuro de paz y una amistad más fraterna no se vea defraudada y para que la colaboración pueda seguir dando bueno frutos para el amado pueblo coreano y el mundo entero", concluyó Francisco.
"Una nueva era"
El sábado, Corea del Norte se congratuló por la cumbre con su vecino del Sur, saludando "un encuentro histórico" que abre la puerta a "una nueva era", después de que los dirigentes de los dos países se comprometieran a preservar la paz y a desnuclearizar la península.
El encuentro del viernes es el preludio a una reunión muy esperada entre Kim Jong-un y el presidente estadounidense, Donald Trump.
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Mientras tanto, el Norte y el Sur decidieron que Moon viajará en otoño a Pyongyang para la que será la cuarta cumbre intercoreana.
*Con información de AFP
