El incidente registrado ayer, cuando el presidente Jimmy Morales fue insultado por un ciudadano tras salir de una actividad denominada Congreso Laboral realizada en un hotel capitalino, fue el tema analizado este jueves en el programa A Primera Hora, de Emisoras Unidas.
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Como invitados en cabina participaron Luis Ramírez, investigador del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales de Guatemala; y Roberto Villeda, abogado y expresidente del Centro para la Defensa de la Constitución (Cedecon). Mientras que por la vía telefónica se conversó con Orlando Ramírez, titular de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia (SAAS); y Mayra Véliz, secretaria general del Ministerio Público (MP).
El secretario de la SAAS dijo que si bien lo ocurrido no está catalogado como delito, el MP debería actuar de oficio en este caso.
Por su parte, Véliz expresó: “Hemos analizado el video y no tenemos delito que perseguir, toda vez que en el Código Penal había un delito desacato a presidentes de los Organismos del Estado, pero fue expulsado del ordenamiento penal por inconstitucionalidad planteada y declarada con lugar en 2005”.
Según la funcionaria, de acción pública el ente investigador no tiene otra figura que perseguir. Y si el presidente se considera agraviado puede acudir a la vía civil para deducir alguna responsabilidad que él considere derivado de los insultos.
“Existe la vía del procedimiento de delitos de acción privada y sus abogados deberían orientarlo”, detalló.
En ello coincidió Ramírez, al indicar que el MP no tiene por qué iniciar de oficio una investigación de este tema, ya que se trata un delito de acción privada.
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“De parte de la persona no hay agresión al presidente, lo que hay es un insulto. En términos jurídicos una agresión es acercarse a otro e intentar hacerle daño”, expuso.
Y Villeda dijo que “el presidente está enfrentando una oleada de oposición, pero no se puede andar ofendiendo a nadie".
Problema de seguridad
El investigador Luis Ramírez opinó que la seguridad de la SAAS cometió un grave error y detalló dos aspectos clave en el tema: la salida era muy cerrada, pues era un callejón donde cabían solo dos personas.
“Definitivamente era elegida por SAAS para que el presidente pudiera ir directo a sus vehículos sin toparse con gente, su personal debió cuidar que nadie se acercara porque ahí Morales era vulnerable”, indicó.
El segundo, es que al escuchar que el ciudadano estaba molesto, Morales le ofreció la mano. “SAAS debió haber impedido que Morales siguiera caminando al escuchar los insultos, fue un error garrafal”, dijo.
A su criterio, lo ocurrido denota un tema de desgaste muy grande del presidente. “Para que una persona se atreva a hacer eso, quiere decir que espera un respaldo social grande. Por suerte no hubo una agresión física”, detalló y resaltó que todas las personas merecen respeto, sean o no funcionarios.
En tanto, Villeda consideró que hay fisuras en la seguridad presidencial, las cuales calificó como preocupantes y alarmantes. No solo por lo ocurrido ayer, sino por el allanamiento en donde “se vio cómo entraron fiscales del MP a empujones” a la Casa Presidencial.
En cuanto al incidente del insulto, Villeda indicó que fue una expresión de reproche para el presidente, que muestra su pérdida de popularidad.
Y añadió que el supuesto responsable es conocido por ser opositor del mandatario, eso deslegitima la espontaneidad y podría hacer pensar que él estaba preparado para hacer esa acción y difundirla.
Mientras tanto, el jefe de la SAAS fue cuestionado sobre por qué actuó de esa manera el personal de seguridad y no evitó que el ciudadano se acercara, ante lo cual dijo que se tienen procesos distintos según cada caso, y recordó que corresponde solo a la Policía Nacional Civil consignar a alguna persona.
“Lo que estaban esperando era una reacción de la seguridad, pero tenemos claro qué reacción tener ante cada situación. La reacción es de tolerancia y no dejarse manipular”, expuso.
Asimismo, señaló que no fue difícil identificar al presunto responsable de insultar al mandatario, y aunque reconoció que no se puede proceder de manera penal contra esta persona, el Departamento Jurídico de la SAAS analiza pedir que este ciudadano no se pueda acercar a 500 metros de donde esté el presidente.