“No han habido avistamientos creíbles (del tirador). La búsqueda continúa. Todos los colegios de la zona han sido asegurados por oficiales”, dijo la Policía Metropolitana de Nasville en un comunicado.
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Autoridades de las escuelas públicas locales informaron que operarán en “lock-out” mientras sigue la búsqueda, lo que implica que no recibirán visitantes externos en el suburbio de Anitoch (donde tuvo lugar el tiroteo) y en el cercano de Cane Ridge.
El sospechoso, identificado como Travis Reinking, de 29 años, fue visto por última vez la mañana del domingo, detrás de su complejo de apartamentos.
La policía advirtió que Reinking, originario de Illinois, podía estar armado con un rifle y un arma corta.
Se cree que el agresor disparó con un fusil semiautomático AR-15, antes de ser desarmado por uno de los comensales del restaurante y huir del lugar. La persona que le quitó el arma fue identificada como James Shaw Jr.
La policía emitió el domingo una orden de arresto en su contra por varios cargos de homicidio.
Las autoridades también revelaron que Reinking trató de ponerse en contacto con el presidente Donald Trump en julio, fecha en la que fue arrestado en las afueras del complejo donde se encuentra la Casa Blanca.
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“No soy un héroe”
James Shaw Jr., de 29 años, el hombre que desarmó al agresor en el interior del Waffle House, en Nashville, reveló qué fue lo que pensó cuando se lanzó sobre el agresor para quitarle el rifle.
“Al sujetar el cañón del arma estaba caliente, pero no me importó. Era vivir o morir”.
Para la policía, este habitante de Nashville fue un héroe que salvó vidas en el lugar, pero él difiere y señala que enfrentó al agresor solo para no ser asesinado, en lo que él llama un “acto egoísta”.
En conferencia de prensa, Shaw contó el domingo que había pasado la noche del sábado en un centro nocturno, y que ingresó en el restaurante solo unos minutos antes que el agresor armado. Relató que él y otro amigo estaban sentados en la barra cuando escuchó los disparos.
“Volteé y vi una persona tirada en la entrada de la puerta, me sobresalté y me escabullí… Me puse atrás de una puerta, una puerta giratoria (…) Su disparo pasó por la puerta; estoy seguro que me rozó el brazo. En ese momento me decidí… tendrá que esforzarse para matarme. Cuando el arma se atascó o lo que haya sucedido, lo golpeé con la puerta giratoria”.
Shaw dijo que ambos comenzaron a forcejear en ese momento y que no prestó atención a su propio dolor cuando sujetó el cañón caliente del fusil AR-15.
“Él maldecía cuando forcejeábamos. Cuando finalmente me apoderé del arma él maldecía que yo estaba mal”, afirmó Shaw.
“No hubo ningún diálogo entre nosotros; yo sólo sabía que tenía que quitarle esa cosa”.
Sobre el arma, agregó que se la quitó y la lanzó por arriba del mostrador, y que luego se llevó al sospechoso afuera de la entrada. Después de sacarlo del restaurante, este corrió en una dirección y Shaw en otra.
*Con información de AFP y AP
