Hubo una época de oro en Televisa, en el que estaba de moda el despilfarro en el interior de la empresa. Una de las beneficiadas era Angélica Rivera.
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Durante el tiempo que prestaba sus servicios, de 1988 a 2007, la actriz gozaba de un jugoso pago por su contrato de exclusividad.
Según algunos medios mexicanos, la empresa de San Ángel firmaba cuantiosos convenios con sus estrellas por al menos cinco años.
Antes de que estallara las crisis, actores como Fernando Colunga, William Levy y David Zepeda recibían mensualmente de 50 mil a 100 mil dólares solo por estar en la nómina de Televisa, pero al colaborar en un proyecto esa cifra se veía duplicada.
La exPrimera Dama de México llegó a cobrar hasta 70 mil dólares al mes solo por mantenerse bajo las órdenes de la televisora.
Sin embargo, al igual que sus colegas, durante su participación en Destilando amor, donde interpretó a la emblemática Gaviota, esa jugosa cifra se duplicó dándole una mensualidad de 140 mil dólares al mes.
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Ella dejó de laborar para ellos cuando se casó con Enrique Peña Nieto, incluso se reveló que le habría pagado 88 millones de pesos por el fin de su contrato de exclusividad.
Duros momentos
Desde hace varios años, Televisa enfrenta una de las peores crisis en su historia, que ha provocado renuncias, despidos y problemas financieros.
Uno de los planes de emergencia impulsados por la empresa, que determinó sacar del aire algunos programas y cerrar publicaciones, fue quitar las exclusividades a sus actores y actrices, así como recortar horarios de sus emisiones.
Según información de EFE, en 1997 comercializaba sus contenidos en 130 países en 23 idiomas. Tan sólo un año antes exportó más de siete mil horas de programación a EE.UU.; más de 13 mil a Europa; 25 mil a Asia.
A Centroamérica le exportó ese año 20 mil 693 horas de programación y 20 mil 243 a Sudamérica.
El panorama ahora es muy distinto para la televisora mexicana. Los efectos de la crisis financiera que atraviesa se han dejado sentir en todos los sectores.
Pero la televisora no se rendirá tan fácil, pues aún tiene algunos ases bajo la manga para sobrevivir a la adversidad.
Además de sus "colchoncitos" en rating como La Rosa de Guadalupe y Hoy, una de las tácticas que ha empleado Televisa ha sido el reciclaje o reestreno de telenovelas que brillaron en años anteriores.
