La familia Kardashian-Jenner vuelve a ser el centro de la atención, esta vez por una nueva propiedad que han adquirido, valorada en 12 millones de dólares. Se trata de una mansión ubicada en Coachella, en las inmediaciones de donde se realiza uno de los festivales de música más populares e importantes. Incluso, fue en este evento que Kylie Jenner conoció a Travis Scott, padre de su primogénita Stormi.
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La lujosa mansión es de 11 mil pies cuadrados y cuenta con siete dormitorios. Una fuente cercana a las socialités explicó que la propiedad “está justo cruzando la calle de donde se realiza el festival anual”.
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Una nueva mansión
Por el momento se desconoce quién de todos los integrantes de la numerosa familia está detrás de esta millonaria compra. Según revelaron los documentos legales, el comprador estaría vinculado a Kris Jenner, la matriarca.
Los representantes de Kim Kardashian y Kanye West aseguraron que la pareja no está involucrada en esta transacción. Especialmente después que se diera a conocer que planean alejarse de Hollywood y mudarse con sus hijos a Chicago.
Se cree que la mansión podría pertenecer ahora a Kylie o a Kendall, las hermanas menores del clan, ya que son ellas quienes no se pierden todos los años el icónico festival y se presume que quizás querrían tener una casa propia en el lugar. Esta mansión se suma al patrimonio familiar, que rebasa los los billones de dólares.