Belinda ofreció el sábado 31 de marzo un concierto en Cancún que la llevó a ser el centro de miles de críticas por subir al escenario con varios tragos en la cabeza.
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La cantante fue contratada para ofrecer un show en la discoteca "Dady’ O", el cual resultó un completo desastre.
¿Qué pasó?
Ella apareció alrededor de las 2:10 de la madrugada del domingo luciendo el atuendo que usó en uno de sus videos y comenzó a interpretar el tema "Egoísta".
Para sorpresa del público, no todo fue color de rosa al ver que la joven, con varias copas en la cabeza, estaba haciendo el ridículo en su presentación.
Sin haber pasado más de cinco minutos ya era evidente su estado de embriaguez, lo cual disgustó bastante a los presentes.
Su segunda canción fue "Déjate llevar", el cual no concluyó. Minutos después la producción soltó nubes de CO2 y ella desapareció del escenario.
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El bochorno no termina
Minutos después brindó por Cancún, por los presentes y por México y se fue de nuevo, por más de 20 minutos.
Apareció al costado del escenario, donde le improvisaron una mesa en la que se encontraban el maquillista Alfonso Waitsmann y su madre, y dijo:
"Aquí estoy, voy a cantar la canción que ustedes quieran… menos esa", debido a que le pedían Sapito, entonces tuvo que cantarla.
Regresó para cantar "Si no te quisiera", con el cual finalizó su presentación, luego de tirarse al piso y mantenerse un rato ahí sin poder levantarse.
Por cuestiones de seguridad su madre decidió sacarla del escenario y evitar así un accidente, pues el elevado nivel de alcohol en su cuerpo no le permitió estar consciente del todo.