Un aterrador incidente sacudió el festival escolar Protea Fees cuando un castillo inflable salió volando con dos niños en su interior, tras ser arrastrado por una fuerte ráfaga de viento. El suceso ocurrió el pasado 31 de mayo en la escuela primaria Protearif Laerskool, durante un evento que reunía a familias para disfrutar de juegos y actividades recreativas.
Testigos relataron que el castillo, aparentemente mal anclado, se elevó varios metros —como un edificio de tres pisos— antes de que los menores cayeran al suelo. Un video captó el impactante momento, mostrando cómo la estructura actuó “como un paracaídas” ante el viento.
Aún se investiga si las amarras fallaron o nunca fueron colocadas.
Inicialmente se reportó que un niño sufrió una fractura de cráneo y otro un brazo roto, aunque luego se confirmó que ambos fueron dados de alta. La escuela publicó en Facebook: “Estamos agradecidos de que los niños estén estables. Gracias a todos los que ayudaron”.
Pese al susto, el festival continuó, pero el hecho reavivó debates sobre normas de seguridad para inflables. Afortunadamente, no hubo víctimas mortales, pero el incidente sirve como advertencia para eventos futuros.