Una mujer fue sentenciada a 57 años en prisión luego de matar a su “amiga” embarazada con un ladrillo antes de sacarle del útero al bebé.
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Esta semana, Rozalba Maria Grime, de 27, resultó culpable de asesinato agravado, intento de asesinato de un bebé, ocultación de un cadáver y obstrucción de justicia, entre otros, reportaron medios de comunicación de Brasil, donde ocurrió el crimen.
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El 27 de octubre del 2020, Grime convenció a Flavia Godinho Mafra, de 24, para que acudiera a un local para un supuesto “baby shower”. En realidad, la criminal la llevó a un espacio de alfarería antigua en el pueblo de Canelinha. Una vez en el lugar, la hoy condenada emprendió a golpes en la cabeza contra la víctima con un ladrillo.
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Seguidamente, la criminal utilizó un cuchillo para abrirle el útero y arrancarle al bebé. La mujer procedió a meter a Godinho Mafra a un horno, donde murió desangrada.
La brasileña tenía 36 semanas de embarazo.
Tras cometer el crimen, la delincuente acudió con su pareja, que creía que ella estaba embarazada, a un hospital donde la dijo al personal que había dado a luz.
El personal de Salud del sitio no creyeron la versión de la mujer y llamaron a la Policía.
El juicio
Su pareja, que fue acusado como sospechoso del crimen, fue absuelto el 27 de julio pasado.
Durante el juicio, Grime le indicó a la Corte que planeó el crimen y que, incluso, había realizado búsquedas en internet sobre cómo remover un niño del útero de la mujer. También recabó información sobre cómo simular los síntomas de embarazo y del nacimiento del bebé.
La Corte en el pueblo de Tijucas en el estado de Santa Catarina sentenció este miércoles a Grime a 56 años y 10 meses de prisión.