Las autoridades separatistas de Nagorno Karabaj indicaron el lunes por la tarde que la explosión de un depósito de combustible causó la muerte de al menos 68 personas y dejó más de 200 heridos, y pidió una asistencia exterior urgente para enfrentar la catástrofe.
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“El número de heridos tras la explosión de un depósito de combustible supera los 200. La mayoría se encuentran graves o muy graves”, declaró el encargado de derechos humanos de la autoproclamada república, Gegham Stepanyan, en las redes sociales.
El depósito se halla en las cercanías de la carretera que conecta la capital regional, Stepanakert (conocida como Jankendi por los azerbaiyanos), en la ciudad de Askerán.
El depósito de combustible se encontraba habitado por armenios pertenecientes a Azerbaiyán. Según lo comunicado por el Ministerio del Interior de la región, el trágico suceso dejó víctimas mortales y personas heridas.
En el momento de la explosión, en las proximidades del depósito de combustible se encontraba una considerable cantidad de vehículos que transportaban a habitantes de Nagorno Karabaj. Las personas buscaban abandonar el enclave luego de la reciente derrota militar sufrida la semana pasada ante las fuerzas armadas de Azerbaiyán.
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Controlan los daños de la explosión en Nagorno Karabaj
Autoridades locales están trabajando arduamente para atender a los heridos y controlar la situación. Numerosas ambulancias y equipos de rescate han sido desplegados en la zona para proporcionar asistencia médica de emergencia y evacuar a las personas afectadas.
Hasta el momento, se desconocen las causas exactas de la explosión y las investigaciones están en curso para determinar las circunstancias que llevaron a este trágico incidente.
Se espera que las autoridades brinden actualizaciones adicionales a medida que avance la investigación y se evalúe el alcance total de los daños.
