De acuerdo al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), la madrugada de este viernes 16 de diciembre, ingresaron a la morgue central, los siete cuerpos provenientes de Loma de Santa Faz, zona 18.
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El equipo de morgue del Inacif está desarrollando los procesos para su identificación y causa de muerte; de momento no se ha determinado tampoco el género de las victimas. El MP indicó que preliminarmente se considera que podría tratarse de mujeres, pero señala que es necesario que el Inacif efectúe los peritajes correspondientes para confirmar dicha tesis.
Luego del hallazgo de siete cadáveres en la colonia Santa Faz zona 18, la asesora jurídica del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), Karla Campos dijo que quienes están cometiendo este tipo de hechos forman parte de estructuras organizadas, ya que existe una planificación y no se trata de crimines al azar.
De la misma manera, a criterio de Campos el Estado se encuentra en frente a una guerra contra grupos que tiene una estrategia trazada lejos de la que tienen las fuerzas de seguridad para controlarlos.
Hallazgo
Los cuerpos fueron localizados debajo del piso de concreto de una vivienda que supuestamente funcionaba de guarida de pandilleros, la noche del jueves en una residencia abandonada en el asentamiento Lomas de Santa Faz en la zona 18 capitalina, en la periferia norte.
Los cadáveres estaban enterrados en un mismo ambiente de la vivienda, “se presume son de sexo femenino y se encuentran en distintos estados de descomposición”.
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Las autoridades efectuaron el hallazgo tras denuncias de vecinos sobre olores fétidos que emanaban de la vivienda en construcción; el vocero de los Bomberos Municipales, Javier Soto, relató que personal de esa entidad trabajó unas 12 horas con palas y piquetas para remover la plancha de concreto.
“Algunas (de las víctimas) se encontraban envueltas en sábanas y otras en nailon”, puntualizó Soto.
Las temibles y antagónicas pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha se disputan ferozmente el control de territorios para exigir extorsiones a comerciantes, muchos asesinados si se niegan a pagar la cuota exigida, según las autoridades.
En Guatemala, buena parte de las 3.210 muertes violentas registradas el año pasado es atribuida por las autoridades al narcotráfico y las pandillas.
* Con información de AFP, Karla Marroquín y Samanta Guerrero Emisoras Unidas 89.7