El número de migrantes procedentes de Venezuela, Nicaragua y Honduras que llegaron y han sido expulsados de Guatemala, en lo que va de este año, aumentó considerablemente en los últimos meses.
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Según indica un informe del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), suman más de 9 mil extranjeros a quienes se les expulsó por la frontera de Agua Caliente, en el departamento de Chiquimula, el paso que conecta a Guatemala y Honduras.
Durante el primer trimestre se interceptó y expulsó a 75 cubanos, pero la cifra aumentó en el siguiente período a 191, según cifras del IGM.
En el caso de los venezolanos, la cifra fue de 17 en ese mismo período, pero luego se elevó a 148. En julio se reportaron otros 40 casos más.
El informe del IGM también reporta que de enero a marzo, se interceptó a 56 hondureños y para el siguiente trimestre el dato se elevó a 128.
Durante los primeros siete meses, la suma total de migrantes expulsados de estas nacionales es de 323 cubanos, 205 venezolanos y 202 hondureños. También se registran grupos de otros países de origen como El Salvador, Nicaragua, Ecuador, Haití, Colombia y Brasil.
Con cifras más bajas, también ser reporta la expulsión de personas provenientes de África y Asia.
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Guatemala, país corredor de migrantes
Guatemala es un país de origen de migrantes que salen hacia los Estados Unidos, pero también es un corredor para miles de latinoamericanos con el mismo objetivo.
Durante la última década, México y Guatemala han percibido cada vez más el impacto de este fenómeno migratorio. Ambos países adoptaron más y nuevos controles y vigilancia entre sus fronteras, bajo la presión de los Estados Unidos por frenar los desplazamientos.
La creciente llegada de venezolanos, responde a la profunda crisis política y económica que lo golpea a su país.
