Al menos 200 trabajadores de Pronico se plantaron frente a las oficinas de Pahame, S. A., para solicitaron la continuidad del servicio en la Empresa Portuaria Santo Tomás de Castilla, en Izabal, que lleva más de una semana detenido.
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De acuerdo con los manifestantes, la paralización de labores pone en riesgo el empleo de aproximadamente mil 700 personas.
Pahame, S. A. suscribió un contrato con Pronico y la Compañía Guatemalteca de Níquel para embarcar y desembarcar mena y carbón, cuyos materiales son materias primas que comercializan ambas compañías.
Pahame decide de manera sola
La semana pasada asociaciones de trabajadores de las dos empresas señalaron que Pahame busca anular el contrato de manera unilateral. Y sin buscar soluciones a lo que les causó molestia en las operaciones.
Manifestantes recordaron que en caso de que no haya un acuerdo, el trámite pasa a la vía legal, pero Pahame no puede dejar de prestar el servicio de manera antojadiza, pues representan pérdidas de alrededor de US$40 mil al día.