El procurador de los Derechos Humanos, Jordán Rodas, solicitó al secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA) Luis Almagro convocar al Consejo Permanente de ese organismo para hacer una visita en el país por la situación irregular en el país.
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La decisión del magistrado de Conciencia se debe a que el Congreso impidió la juramentación de Gloria Porras Escobar como magistrada titular de la Corte de Constitucionalidad.
Porras fue reelecta por el Consejo Superior de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), pero por dos objeciones contra el proceso se impidió su juramentación. El Consejo Universitario todavía no resuelve las acciones.
“Como es de su conocimiento, Guatemala atraviesa un crónico debilitamiento del Estado de derecho. Cuyos rasgos más inquietantes son la desobediencia reiterada de los fallos dictados por el máximo tribunal constitucional. Por parte de las altas autoridades del Congreso e instancias del propio Organismo Judicial. El irrespeto a la separación de poderes, con serias afectaciones para el orden democrático”, explicó Rodas en su misiva.
Advertencia de la OEA desde el año pasado
En noviembre pasado, la organización envió una misión especial a petición del presidente, Alejandro Giammattei, de convocar la Carta Democrática Interamericana. Debido a las manifestaciones en su contra por las decisiones del Congreso y del Ejecutivo.
La misión especial de la OEA estuvo a cargo de Fulvio Pompeo enfatizó en un proceso transparente para el relevo de los magistrados de la Corte de Constitucionalidad. Para que se respete la independencia judicial.
“La directiva del Congreso consumó un grave acto de alteración del orden jurídico interno. Acto violenta la decisión autónoma de uno de los cinco órganos de designación de magistrados. La falta de transparencia y sustanciación del argumento para impedir la juramentación de la magistrada Porras, configura una conducta autoritaria. Invasiva de las jurisdicciones en el Estado democrático”, resaltó Rodas.
En esa ocasión, el vicepresidente, Guillermo Castillo, prefirió no reunirse con la misión de la OEA para que atendiera a organizaciones civiles.
