Celebrado cada cinco años, el tema del Día mundial de la estadística de 2020 se denomina “Conectando el mundo con datos en los que podemos confiar”, reflejando la importancia de la confianza, los datos fidedignos, la innovación y el bien público en los sistemas estadísticos.
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La conmemoración se produce cuando la forma en que tratamos la información está cambiando para permitirnos sistematizarla mejor, con el fin de mejorar nuestra vida cotidiana. Actualmente se hace a través del llamado big data, un campo que trata las formas de analizar, extraer sistemáticamente la información o manejar conjuntos de datos que son demasiado grandes o complejos.
Día mundial de la estadística
“Hoy en día, los métodos de recolección han sido ampliados para manejar las cantidades masivas de datos que se generan cada día. Poderosas supercomputadoras manejan estos flujos de datos con la ayuda de sofisticados algoritmos que pueden identificar información útil enterrada en lo profundo de los datos”, explicó David Tuffley, profesor titular de ética aplicada y ciberseguridad en la Universidad de Griffith, en el Reino Unido.
Y es por eso que el experto considera que los científicos de los datos se comparan con los “buscadores de oro” de los viejos tiempos.
“Buscan las pepitas de oro que yacen enterradas. Hay miles de millones de dólares escondidos en esos datos. Por ejemplo, Facebook fue valorado recientemente en 40 mil millones de dólares –eso es por un servicio gratuito–, el valor está en las publicaciones que la gente hace. Esas publicaciones le dicen mucho a Facebook sobre el tipo de cosas que nos gustaría comprar”, agregó.
Según Tuffley, el Día mundial de la estadística es una fecha importante porque necesitamos estadísticas fiables y precisas que nos ayuden a planificar todas las cosas que necesitamos. “El tema de este año es bueno porque las estadísticas necesitan mejorar su reputación. En las manos equivocadas las estadísticas pueden ser usadas para confundir y engañar, de ahí el viejo dicho de que ‘hay mentiras, grandes mentiras, luego las estadísticas’”, concluyó.
Para saber más, conversamos con Eerke Boiten, profesor de ciberseguridad en la Escuela de Informática y Ciencias de la Computación de la Universidad de Montfort, en Leicester, Reino Unido.
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4 preguntas a…
Eerke Boiten, profesor de ciberseguridad en la Escuela de Informática y Ciencias de la Computación de la Universidad de Montfort, en Leicester, Reino Unido.
- ¿Cómo ha cambiado la forma en que se recogen los datos en los últimos años?
El mayor cambio en la recolección de datos en estos días es la cantidad de datos recolectados sobre el comportamiento de las personas en línea y en el mundo real. Estos datos a menudo se recogen de forma casi imperceptible y luego se manejan también bajo el radar. Por ejemplo, el historial de localizaciones de Google que puedo ver en mi cuenta está vacío porque he ejercido el control de privacidad allí. Sin embargo, estoy seguro de que Google Maps ha almacenado una gran cantidad de historial de ubicación de mi teléfono, al que solo ha accedido mi cuenta de Google. Los datos sobre la publicidad y el comportamiento en línea son rastreados y comercializados en formas aún más oscuras que esa.
- ¿Qué tan importante es el big data?
El big data en el mundo de hoy cuenta ricas historias sobre personas y fenómenos. Estas historias pueden ser analizadas para el bien colectivo, a veces incluso para el bien individual, pero también para dañar al individuo. El conocimiento que está presente en el big data sobre nuestro comportamiento significa que somos menos libres de vivir nuestras vidas y de ejercer elecciones autónomas. Incluso estamos empezando a autocensurar nuestro comportamiento sabiendo que siempre puede ser observado.
- El Día mundial de la estadística se celebra el 20 de octubre. Cuéntanos más sobre el campo de la estadística…
Creo que es un tema importante en este contexto porque es la esencia de mucho de lo que se nos vende hoy en día como “inteligencia artificial” (IA). El campo de la estadística es muy consciente de sus limitaciones, como la diferencia entre correlación y causalidad, o la falacia de la frecuencia base. Estas lecciones no siempre se conocen donde la IA está reinventando los métodos estadísticos.
- ¿Qué hay del futuro? ¿Cómo podría el big data ayudarnos a desarrollar ciudades más inteligentes?
El desafío para las ciudades inteligentes es reunir los datos correctos y procesarlos de la manera correcta, de tal manera que el resultado sea que la ciudad inteligente pueda ser controlada en beneficio de la gente, sin terminar también controlando a la propia gente.