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Revelan nuevos detalles del caso del supuesto ataúd vacío en Sololá

Un video circula en las redes sociales en el que se supuestamente se realizó un entierro con un ataúd vacío en Panajachel, Sololá.

El video fue grabado el domingo 28 de junio en el cementerio de la aldea Monte Mercedes, en dicho departamento.

Todo sucedió cuando se realizaba el entierro de Isaías Julajú, quien murió por coronavirus Covid-19. Se confirmó que la víctima mortal era hijo del concejal primero de la Municipalidad de Sololá.

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La víctima mortal por el virus trabajaba en una carnicería de Panajachel, así también integraba un grupo musical cristiano.

De acuerdo con información proporcionada, Julajú días antes sintió molestias en la garganta y presentaba atlos grados de fiebre,  por lo que visitó a un médico particular, quien le suministró una inyección. El medicamento le alivió las molestias por unas horas.

Horas más tarde volvieron las molestias y se le notificó al Centro de Salud de la localidad. Por tal motivo se coordinó su traslado al hospital de la comunidad, sien embargo, falleció antes de ser ingresado.

Protocolos de salud

Según los protocolos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), el cuerpo de la víctima fue depositado en una bolsa para cadáveres. Luego se habilitó una fosa común y sacos de cal para el entierro.

Sin embargo, pobladores molestos por la forma en la que fue sepultado, a pesar del toque de queda prolongado, salieron y llegaron al cementerio para exigir a las autoridades de la salud les entregaran el ataúd.

Después abrieron el ataúd y la bolsa para cadáveres para verificar el cuerpo del fallecido, pero manifestaron que no lo encontraron. Esa información también circula en las redes sociales.

El personal de salud determinó depositar el cuerpo en un nicho y no en la fosa, lo que provocó malestar entre los comunitarios de Panajachel.

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Nuevas disposiciones

Las autoridades de ese municipio establecieron nuevas acciones disposiciones, entre estas, se restringió el ingreso de cinco comunidades de Sololá a Panajachel.

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Esa situación provocó protestas durante dos días por los pobladores.

“Estas disposiciones municipales tienen vigencia durante 15 días, tiempo que dura una cuarentena”, según las autoridades municipales.


Hasta el momento se busca el diálogo entre ambas partes debido a ese acontecimiento.

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