El político estadounidense Joe Biden rompió su largo silencio para negar una acusación de agresión sexual en su contra de una empleada que trabajó en su despacho en la década de 1990.
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"Nunca ocurrió", sentenció este viernes el político demócrata que aspira a derrotar a Donald Trump.
Confinado y desde el sótano de su casa, Biden negó las acusaciones que desde hace más de un mes agitan la palestra en Estados Unidos, en medio de su aún no nombrada candidatura.
Biden, de 77 años, estaba bajo presión para responder personalmente las acusaciones hechas por Tara Reade, de 56 años, que su campaña ya había desmentido.
"No es cierto. Estoy diciendo sin dudas que esto nunca ocurrió", dijo Biden en el matinal de la cadena de MSNBC.
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"No sé por qué después de 27 años todo esto vuelve al tapete", agregó, matizando que no iba a cuestionar las motivaciones de la denunciante.
Señalamientos del pasado
En el pasado varias mujeres han acusado a Biden de tocarlas de una forma inapropiada y en un principio Reade se limitó a esta queja, sin referirse a la agresión.
Biden no es aún el candidato oficial del Partido Demócrata, ya que debe ser escogido en la Convención Nacional, pospuesta para agosto debido a la pandemia de coronavirus.
Sin embargo, es el único candidato que queda en liza y ya cuenta con apoyos como el del expresidente Barack Obama, el aval de su rival en las primarias, Bernie Sanders, y el respaldo de la líder demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Esta semana, cuando la tormenta mediática por las acusaciones se agudizó, Biden organizó un foro virtual sobre los temas importantes para las mujeres en la campaña y en la presentación aprovechó de cosechar el apoyo de Hillary Clinton.
Biden ha prometido que su vicepresidente será una mujer.
Para los republicanos, estas acusaciones han sido una oportunidad de ajustar viejas rencillas con los demócratas y varios de sus líderes han hecho referencia a la diferencia en el trato mediático que recibió esta acusación, en comparación con la denuncia contra el juez conservador Brett Kavanaugh cuando Trump lo nominó para la Corte Suprema.