Más de mil salvadoreños marcharon este domingo para exigir a la Asamblea Legislativa (Congreso) que autorice un préstamo de 109 millones de dólares, pedido por el gobierno del presidente Nayib Bukele para comprar equipamiento para las fuerzas de seguridad del país.
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"Aprueben el dinero para nuestros soldados y policías"; "dipuratas inútiles"; "si no quieren trabajar, el pueblo los va a sacar", eran algunas de las leyendas que portaban escritas muchos de los manifestantes, concentrados en las calles cercanas a la sede parlamentaria.
"Esta es una muestra innegable de que la gente ya esta harta de que los diputados de la derecha y la izquierda opositora no trabajan por los salvadoreños ni dejan trabajar al gobierno del presidente Nayib Bukele", dijo a la prensa Walter Araujo, uno de los principales organizadores de la protesta.
Araujo, quien en el pasado fue diputado y llegó a ser presidente del Congreso y del Tribunal Supremo Electoral (TSE), aseguró que "los ciudadanos darán un compás de espera de quince días" a los diputados para que aprueben el préstamo, y advirtió que de lo contrario "el pueblo saldrá nuevamente a las calles a protestar".
Cruces negras
Durante la manifestación, a la que acudieron en su mayoría simpatizantes del partido Nuevas Ideas, el cual ayudó a formar el presidente Bukele, los inconformes dejaron pegadas cruces negras en un portón de acceso al Congreso.
Esto, en señal de que en las elecciones legislativas de febrero de 2021, "los diputados que no apoyan al pueblo no serán reelectos".
El pasado 9 de febrero, en una acción que ha sido muy criticada por distintos sectores en el país, soldados del ejército fuertemente armados con fusiles de asalto y policías antimotines entraron al llamado Salón Azul de la Asamblea Legislativa, antes de la llegada del presidente.
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La crisis política generada en ese momento se originó por la negativa de los legisladores a aprobar el préstamo, clave para mantener en marcha el plan gubernamental en contra de las pandillas salvadoreñas.
Al ver frustrada la convocatoria que hizo de una sesión extraordinaria, el domingo pasado Bukele dio un plazo de una semana a la Asamblea Legislativa, de mayoría opositora, para que aprobara el préstamo.
No obstante, la Suprema Corte de Justicia frenó las intenciones del Ejecutivo y ordenó el pasado lunes a Bukele abstenerse de hacer "uso de la Fuerza Armada en actividades contrarias a los fines constitucionalmente establecidos" y de poner en riesgo la democracia y la separación de poderes en el país.
Además, el máximo tribunal dejó sin efecto la convocatoria para una sesión extraordinaria de la Asamblea Legislativa que había realizado el Consejo de Ministros.
*Con información de AFP
