El sargento Ron Helus fue una de las 12 víctimas mortales que dejó el tiroteo perpetrado la noche del miércoles en el Borderline Bar and Grill, de Los Ángeles.
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Helus fue el primer oficial en llegar a la escena del crimen, donde un tirador, posteriormente identificado por las autoridades con Ian David Long, un exmarine de 28 años de edad, había abierto fuego en contra de la multitud presente en el bar.
Llegó pocos minutos después de la primera llamada a los servicios de emergencia y, al escuchar el ruido de los disparos, se aprestó a ingresar al lugar.
Helus, quien contaba con larga experiencia como instructor de armas para el FBI y en equipo especializado SWAT, era consciente del riesgo que corría, por lo que antes de cumplir con su labor, hizo algo importante: el sargento llamó por teléfono a su esposa y le dijo que la amaba, según el sitio Infobae. Agregó que debía terminar rápidamente la comunicación y luego colgó. Fue la última vez ambos pudieron conversar.
Poco después de entrar al bar, el agente recibió varios impactos de bala por parte de Long. Un compañero logró retirarlo de la línea de fuego, pero lamentablemente falleció cuando era trasladado al hospital.
Helus había servido durante 29 años para la Policía de Estados Unidos y planeaba retirarse el próximo año.
“Murió como un héroe. Entró para salvar vidas”, dijo el sheriff del Condado de Ventura, Geoff Dean.
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Para cuando las autoridades volvieron a entrar al bar, luego de formar un perímetro de seguridad, Long ya estaba muerto. Las primeras investigaciones apuntan a que se quitó la vida de un disparo.
En conferencia de prensa la mañana del jueves, el sheriff Dean describió a los reporteros “una escena horrible” con “sangre por todos lados”.
Según Dean, el atacante estaba armado con una pistola Glock, equipada con un cargador más grande que el de 10 balas para el que normalmente está concebida. Aclaró, además, que el arma fue comprada legalmente.
Horas después de la tragedia, miembros de la oficina del Sheriff de Ventura y decenas de civiles se congregaron para presenciar el momento en el que el cuerpo de Helus era transportado a bordo de un vehículo.
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Conocido
En sus declaraciones, el sheriff también reveló que la policía había tenido “contacto con Long a lo largo de los años por eventos menores”.
En abril, había sido atendido por expertos en psicología de la policía, por comportarse de “manera irracional”.
Dean aclaró, no obstante, que, con la investigación aún en curso, no hay motivos que lleven a pensar a las autoridades que se trató de un atentado terrorista.
Estados Unidos es escenario frecuente de tiroteos en lugares públicos. De hecho, el registrado este miércoles es el tiroteo masivo número 307 en lo que va del año, según el registro de la organización Gun Violence Archive.