La capital nicaragüense, Managua, amaneció el domingo en caos. Los enfrentamientos entre protestantes y agentes antimotines de la Policía Nacional han dejado cerca de 30 muertos a nivel nacional, informan organismos de derechos humanos y estudiantes universitarios. Una de las últimas víctimas fue el periodista Ángel Gahona, de la caribeña ciudad de Bluefields, abatido por un certero disparo, durante una transmisión en vivo por Facebook.
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El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CNDH) reportó 27 personas muertas desde el miércoles; sin embargo, el Gobierno solo reconoció que 10 personas han fallecido en los enfrentamientos. Otros medios de comunicación reportaron hasta la madrugada del domingo más decesos, por lo que la cifra podría superar los 30.
Los manifestantes acusaron a las fuerzas paramilitares aglutinadas en la Juventud Sandinista (JS) y a los antidisturbios de ser responsables de las muertes contabilizadas hasta ayer. El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Silvio Báez, una voz crítica al Gobierno, pidió al presidente Daniel Ortega que deponga “su actitud arrogante, escuche al pueblo, ábrase a dialogar con toda la sociedad, sienta el dolor de tantas familias y colabore a la paz en el país”.
“Estoy preocupado por cuanto está sucediendo en estos días en Nicaragua, donde, tras una protesta social, se han producido enfrentamientos que han causado algunas víctimas”. Papa Francisco
Ortega dio un paso atrás
En el marco de un encuentro con empresarios de zonas francas, el presidente Ortega anunció ayer por la mañana que el Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS) decidió revocar la reforma que habría incrementado las contribuciones obreras y patronales para darle estabilidad financiera al sistema de pensiones.
Según Ortega, la revocatoria del decreto permitirá abrir el diálogo con los sectores opositores que se lanzaron a las calles. Citado por la agencia “AFP”, el mandatario nicaragüense criticó duramente a los manifestantes y los comparó con “pandilleros”, como los que actúan en el norte de Centroamérica.
“Esto nos obliga a poner en nuestra agenda el combate a las pandillas. Combatirlas para que no sigan actuando de la forma en que actúan, que no se sigan matando entre ellos mismos y que no vayan a asaltar establecimientos”, dijo Ortega en la reunión.
¿Por qué salió a protestar Nicaragua?
Las protestas en el país centroamericano iniciaron el pasado miércoles tras la inconformidad de la población a las reformas a la Seguridad Social, que aumenta de 6.25% a 7% la contribución de los trabajadores e impone a los pensionados una cuota de 5% para servicios médicos, mismos que eliminó el mandatario nicaragüense ayer. Sin embargo, las manifestantes no solo piden que el Gobierno dé marcha atrás a la reformas, sino que renuncie a su cargo tras una administración “corrupta y represora”.
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En un principio las manifestaciones empezaron con jóvenes que se autoconvocaron a través de las redes sociales para oponerse a las reformas, pero pronto lograron el respaldo popular de diversos sectores del interior del país. Bastiones sandinistas como Estelí, León y el barrio indígena de Monimbó, en Masaya, se sumaron a dichas manifestaciones.
Censuran a medios
Con las manifestaciones también llegó la censura. El Gobierno ordenó al Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Corres (Telcor) que las empresas de televisión por cable sacaran del aire al canal de noticias “100% Noticias” y otros dos, entre ellos uno de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).
Condicionan diálogo
Aunque el Gobierno dio pie atrás con las reformas al aceptar dialogar con el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), la gremial condicionó desde el sábado sentarse a la mesa si cesaba de inmediato la represión policial y la liberación de los detenidos durante los enfrentamientos.
Las tres condiciones planteadas por el Cosep son: Cese inmediato a la represión de la Policía Nacional y de las fuerzas de choque afines al gobierno nicaragüense y garantizar el derecho a la movilización pacífica, liberar de forma inmediata a los ciudadanos detenidos por ejercer su derecho a expresarse libre y pacíficamente, y restablecer y garantizar la irrestricta libertad de prensa y expresión.
Saqueos en supermercados
Los medios afines al gobierno de Nicaragua iniciaron a trasmitir en directo saqueos a supermercados y tiendas electrónicas de todo el país, sin que la Policía se presentara para evitarlos. Decenas de pobladores salían de los establecimientos con alimentos, ropa, electrodomésticos y celulares.
Hasta pasada las 11 de la mañana, Ortega desplegó a oficiales por los supermercados para resguardarlos, aunque las fotos en redes sociales mostraban a agentes antidisturbios con productos en manos. El Gobierno acusó a los jóvenes protestantes del saqueo; sin embargo, estos dijeron que miembros de la Juventud Sandinista eran los responsables como parte de un plan del Ejecutivo para distraer la atención de las muertes.
Pronunciamientos
Tras las jornadas violentas, el Departamento de Estado de los Estados Unidos emitió un comunicado en el que hizo un llamado a la calma y condenaba cualquier acto de violencia y el uso de la fuerza de los policías en contra de los civiles nicaragüenses.
También el papa Francisco mostró su preocupación por Nicaragua. En tanto la portavoz de la Alta Representante de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, consideró que la violencia es inaceptable, y las diferencias solo pueden resolverse a través de un diálogo incluyente.
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* Con información de Metro Nicaragua.