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De acuerdo con la agencia de noticias AFP, expertos aseguran que los recientes terremotos ocurridos en Ecuador y Japón no están relacionados, pero el aumento de la actividad sísmica en el mundo incrementa los temores de un “megaterremoto” en 2016.
Aunque en los últimos tiempos se han producido varios movimientos telúricos en diferentes lugares del denominado “Cinturón de Fuego del Pacífico“, estos no están necesariamente vinculados, señala AFP en una nota, aunque no revela los nombres de los expertos que otorgaron dichos datos.
Sin embargo, los recientes sismos en Japón, un país en el que se produce el 20 por ciento de los terremotos más violentos en el mundo, son algo que se debe considerar para intentar evaluar la probabilidad de un potencial “megaterremoto” a lo largo de la costa sur del archipiélago (Nankai) y hasta Tokio, continúa la nota.
Las autoridades japonesas estiman que la probabilidad de que ocurra una catástrofe de este tipo en los próximos 30 años es de 60 a 70 por ciento (20 por ciento en la próxima década). Esta provocaría un enorme tsunami que le costaría la vida a más de 320 mil personas y destruiriía 2,4 millones de hogares en Japón.
Los recientes sismos en la isla de Kyushu dejaron 42 muertos y más de mil heridos, mientras que el terremoto de 7.8 grados que azotó Ecuador el sábado dejó 272 muertos y más de 2 mil heridos.