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La genética en muchas ocasiones es muy precisa, y a veces parece que los padres e hijos hubieran sido esculpidos por las mismas manos.
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Tal es el caso de Liv Freundlich, quien con su pelo rojo, su rostro lleno de pecas luce exactamente igual a su famosa mamá, la actriz Julianne Moore.
Getty Images Foto:
La adolescente aparece en público en muy pocas ocasiones, y los eventos a los que acude son minuciosamente seleccionados por sus padres.
Sin embargo, madre e hija fueron fotografiadas hace unos días en Nueva York en un juego de Boston vs. Celtics y parece que prácticamente podrían ser hermanas.
Ambas fueron captadas por cámara varias veces, y se puede ver que la hija heredó la belleza de su madre, con un aspecto único.
Getty Images Foto: