Debido al derrumbe que ocurrió en el kilómetro 10.5 carretera a El Salvador el 24 de octubre pasado, Publinews investigó acerca de los reglamentos para construir y las zonas rojas que incrementan la posibilidad de un desastre.
Guatemala es un país vulnerable a los fenómenos naturales debido a su posición geográfica y a las cercanías con las franjas tectónicas. A pesar de que existen normas de construcción, algunas personas hacen caso omiso de ellas.
Tal es el caso del desprendimiento que ocurrió en carretera a El Salvador y que afectó el tráfico vehicular por una semana debido a que la propietaria rebasó los límites que la Municipalidad de Santa Catarina Pinula le había concedido.
En el país existen varios lugares que son catalogados como zonas de desastres, según la Conred, aunque son las distintas municipalidades las que verifican y tienen los datos exactos de los mismos.
La Municipalidad de Guatemala con el “Plan de Ordenamiento Territorial” establece la caracterización territorial del municipio distribuida en seis zonas generales conocidas bajo la denominación de zonas G (G0, G1, G2, G3, G4 y G5).
Esta división depende de las características naturales que cada área tenga en cuanto a topografía y orografía, y las características urbanas determinadas por la relación de cada predio con vías del sistema vial primario.
¿Qué es un desastre?
Erick Jaramillo, bombero voluntario, indicó que “un desastre es un evento que causa calamidad, puede ser repentino o previsible y que trastorna el funcionamiento de la sociedad”.
Así mismo aseveró que puede causar pérdidas humanas, materiales, económicas y ambientales.
Los desastres se dan por tres condiciones:
- Que las personas vivan en lugares peligrosos por ejemplo cerca de un volcán activo, en laderas con peligro de deslizamientos, o cerca de ríos caudalosos que se pueden desbordar.
- Que ocurra un fenómeno extremo, ya sea natural o causado por ciertas actividades humanas.
- Que este fenómeno provoque muchos daños, particularmente en aquellos lugares en donde no se ha tomado ninguna medida para prevenirlos.
La alcaldía elaboró un reglamento que consta de 193 artículos que rige todas las actividades de construcción, ampliación, modificación, reparación y demolición de edificaciones que se lleven a cabo en la ciudad de Guatemala y dentro del área de influencia urbana.
El objetivo de “El Reglamento” es salvaguardar la vida y la salud de las personas y asegurar el buen uso y ocupación racional del terreno.
Así mismo la Conred fabricó, por medio de acuerdo ministerial, un documento que contiene las normas de seguridad estructural de edificaciones y obras de infraestructura.
La vulnerabilidad
Es la incapacidad para resistir cuando se presenta un fenómeno amenazante, o para reponerse después de que ocurrió un desastre.
Galdámez también dijo que no se puede evitar que ocurra una tormenta o un sismo, aunque es necesario prevenir.
Luisa María Godínez