El Eintracht Frankfurt se proclamó campeón de la Liga de Europa, este miércoles, luego de vencer al Glasgow Rangers por 5-4 en los penaltis (1-1) en la final en el estadio Sánchez Pizjuán, de Sevilla. El colombiano Rafael Santos Borré, marcó el penalti decisivo.
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Eintracht Frankfurt 1-1 (5-4) Rangers
El Rangers se adelantó con un tanto del nigeriano Joe Aribo (57), pero Santos Borré igualó con un remate a bocajarro (69), antes de llegar a los penales.
El portero Kevin Trapp, uno de los héroes de su equipo, detuvo el penal de Ramsey para que poco después Borré sellara con su gol desde los once metros la histórica victoria del Eintracht.
Los germanos alzaron el segundo trofeo continental de su historia 42 años después de ganar en 1980 la Copa de la UEFA contra el Borussia Mönchengladbach.
En la primera parte, los dos equipos dejaron clara su intención de jugar directo sin apenas juego en el centro del campo, aunque manteniendo cierta prudencia ante el temor de cometer cualquier error fatal.
El Rangers abre el marcador
El Eintracht pareció querer más la pelota ante un Rangers más cómodo al contraataque, pero que tardó en asentarse en el encuentro.
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McGregor, que sostuvo a los escoceses en la primera parte, sacó una buena mano para desviar un duro tiro de Ansgar Knauff (20).
El Eintracht llegaba más, pero su falta de acierto le impidió adelantarse en una primera parte en la que apareció poco Borré, uno de los pilares del ataque germano.
Nada más volver del descanso, el Eintracht siguió dominando y acosando la portería de McGregor, pero cuando más cerca parecía el tanto alemán, sorprendió el Rangers.
Aribo aprovechó un error de la defensa rival, se escapó de Tuta y se plantó ante Trapp para soltar un disparo que se coló ajustado al palo (57).
‘El Comandante’ nivela el juego
Pero, sólo dos minutos después, Borré apareció entre dos centrales rivales para rematar en boca de gol un centro desde la izquierda de Filip Kostic para poner el 1-1 en el marcador (69).
El empate animó al Eintracht que empezó a meter en su campo al Rangers, condenado a buscar la portería contraria con balones largos y contraataques.
Borré pudo adelantar a su equipo en una internada frenada por la defensa casi en la línea de gol (95), a lo que respondió el Rangers con un disparo de Borna Barisic que puso en aprietos a Trapp (107).
El portero del Eintracht volvió a salvar un disparo a bocajarro de Ryan Kent (118) para mandar el partido a la tanda de penaltis, donde volvería a erigirse en héroe de su equipo deteniendo el disparo de Ramsey.
