El dueño del club Inter Moengotapoe y vicepresidente de Surinam, Ronnie Brunswijk, de 60 años, será investigado por la Concacaf por alinear en el partido contra el Olimpia, además, porque regaló dinero a los jugadores del club hondureño, anunció el ente regional.
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Brunswijk, de 60 años, un exguerrillero y agricultor, fue titular en el ataque, junto con Damian Brunswijk, el 10 del equipo y su hijo, en el partido jugado el martes en Paramaribo y que ganó el equipo hondureño por 6-0 por octavos de final de la Liga de la Concacaf.
Luego de la derrota de su equipo, en redes sociales circuló un video en el que se veía a Brunswijk aparentemente distribuyendo dinero a los jugadores de Olimpia en su vestuario.
“Estamos sumamente preocupados por el contenido de un video que circula en las redes sociales y que plantea posibles problemas de integridad en torno al partido de la Liga Concacaf entre Inter Moengotapoe y Olimpia”, señaló en un comunicado el organismo rector del fútbol de América del Norte, Centroamérica y el Caribe.
Según el documento “el asunto se remitirá al Comité Disciplinario de Concacaf, que iniciará una investigación formal y se proporcionará una actualización adicional cuando ese proceso haya concluido”.
Con su presencia en la formación titular del equipo surinamés, “Ronnie Brunswijk se convierte así en el jugador más veterano (tiene 60 años y 198 días) en disputar un partido internacional oficial de clubes”, comentó en Twitter el periodista deportivo conocido como MisterChip.
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Su vida
El episodio del martes es solo el último en la vida de Brunswijk, un ex sargento del ejército y ex líder rebelde que participó en la guerra civil de Surinam en la década de 1980 contra el entonces dictador Desi Bouterse.
En la actualidad, Brunswijk es un hombre de negocios millonario y además es político, pero en 1999 fue declarado culpable de tráfico de drogas y sentenciado a ocho años de prisión por un tribunal de los Países Bajos, de la que Surinam fue colonia.
Un tribunal francés lo declaró culpable del mismo delito y en 2000 lo condenó a 10 años de prisión. Sin embargo, Brunswijk está a salvo en su país, ya que Surinam no extradita a sus ciudadanos.
Brunswijk no participará en el partido de vuelta de su equipo en Honduras, ya que no puede salir del país sin correr el riesgo de enfrentar problemas legales.
El vicepresidente nació el 7 de marzo de 1961, seis meses antes de la creación de la Concacaf. En su camiseta lleva el número 61. Ya ha disputado otros partidos locales defendiendo los colores de su equipo.
*Información AFP