Casi dos semanas después de hacer historia en el Tour de France, una de las vueltas ciclísticas más importantes y exigentes del mundo, el colombiano Egan Bernal tuvo un saludo inesperado antes de aterrizar en su natal Colombia.
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Egan Arley Bernal Gómez llegó la noche del lunes a tierra cafetera en medio de algarabía, aunque su pueblo natal, Zipaquirá, está a dos horas de la capital colombiana.
Brindis en pleno vuelo
No obstante, antes de pisar tierra, Bernal tuvo un breve, inesperado pero muy satisfactorio homenaje en pleno vuelo.
En el interior de su vuelo en una aeronave de la también colombiana Avianca, la tripulación y pasajeros realizaron un brindis con el campeón de del Tour.
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La voz de una azafata insta a los pasajeros a alzar sus copas.
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A bordo de este vuelo se encuentra el responsable de que todo un continente vibrara de emoción", se escucha en el avión.
Es entonces cuando desde uno de los asientos de atrás se levanta tímidamente el ciclista colombiano que ya ha hecho historia, y brindó.
Llega a Colombia
Después de ser aplaudido y halagado con palabras en el interior del avión, Bernal llegó a Colombia alrededor de las 8 de la noche del lunes.
Un camino de luces rojas le hicieron el merecido reconocimiento tras bajar de la aeronave.
Aterriza en Zipaquirá
Sin embargo, no tardó mucho en la capital colombiana ya que la nostalgia le indicaba que debía ir pronto a su pueblo, Zipaquirá.
Es entonces que sube a un helicóptero y en compañía de su amada llegó hasta el pueblo en donde reside con su familia y al cual vio desde el aire.
En la Plaza de Zipaquirá, Bernal ofrecerá a su país el suéter amarillo que lo identifica como campeón del Tour.