A través de un comunicado publicado en su sitio web oficial, Boca Juniors solicitó a la Conmebol la suspensión de la final de la Copa Libertadores de América 2018, aplazada para este domingo tras los hechos de violencia registrados la víspera en las cercanías del estadio de River Plate.
PUBLICIDAD
“Luego de los hechos de violencia sufridos en las inmediaciones del estadio (Monumental), Boca Juniors considera que esas condiciones no están dadas y solicita la suspensión del partido, así como la aplicación de las sanciones correspondientes previstas en el Artículo 18, para que la Conmebol actúe en consecuencia”, advirtió el cuadro “xeneize” en el texto.
“En la tarde de ayer Boca Juniors solicitó postergar el partido por los incidentes y se estableció como prioridad que el mismo pueda ser disputado en igualdad de condiciones”, remarcó la entidad bonaerense.
El partido de vuelta de la final de la Libertadores se empañó luego de que hinchas locales agredieran con objetos, como piedras y palos e incluso gas pimienta, el autobús en el que viajaban los jugadores de Boca Juniors.
El mediocampista y capitán del club “xeneize”, Pablo Pérez, y el volante Gonzalo Lamardo resultaron heridos por las esquirlas de las ventanas rotas, sufriendo lesiones en los ojos que obligaron a su trasladado a un hospital cercano del estadio.
Minutos antes del anuncio de Boca, el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, había afirmado que el partido se jugaría como estaba estipulado, a las 17:00 (hora de Argentina). “No cambió nada”, dijo el dirigente, recordando el “pacto de caballeros” al que llegaron el sábado los presidentes de ambos clubes para que se jugara la final.
PUBLICIDAD
El juego de ida, disputado el pasado 11 de noviembre en la Bombonera, terminó en un empate 2-2. No se registraron incidentes durante ese partido.
Lee también: El error que hizo que el operativo fallara en la Superfinal River-Boca
