El entrenador de Boca Juniors ha confesado que teme por sus jugadores por un brote de paperas en el club, previo a la final de vuelta de la Copa Libertadores.
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Y es que cuatro jugadores de las categorías inferiores de Boca Juniors se enfermaron de paperas y alertaron al departamento médico del equipo para intensificar los cuidados internos para que ninguno de los futbolistas del plantel mayor se contagie, lo que pone en riesgo la final de vuelta por la Copa Libertadores ante River Plate.
La preocupación del entrenador no es para menos, pues cuatro de los juveniles contagiados viven en la misma pensión donde también están el defensa Leonardo Balerdi y el mediocampista Gonzalo Lamardo, que forman parte del equipo que dirige Guillermo Barros Schelotto.
Según el informe médico, Balerdi no presenta ningún síntoma, pero existe la posibilidad de que durante la concentración para el partido ante Patronato sea hospedado en una habitación aislado de los demás, debido a que pueda contagiar a sus compañeros, pues pasa mucho tiempo con los juveniles.
Sin embargo, se supo que otros 10 integrantes de la cantera presentaron síntomas y fueron separados del club por unos días para prevenir que el virus se propague.
Además, según la prensa argentina, como medida de prevención, este fin de semana se cerrará la pensión para cortar definitivamente el brote de la enfermedad y mandarán a los jugadores a un hotel.