Un grupo de residentes de Berazategui, en el Gran Buenos Aires, tomó la justicia por sus propias manos tras capturar a un presunto ladrón que robó una vivienda. El sujeto, sorprendido saliendo de una casa con una garrafa de gas, una hidrolavadora y una carretilla, fue sometido, desnudado y obligado a caminar por una carretera mientras los vecinos lo grababan y lo insultaban.
Los videos, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, muestran al hombre siendo reducido y amenazado por los enfurecidos vecinos. “¡Vos no vas a robar nunca más, hijo de puta!”, le gritó uno de ellos. Otros advirtieron: “Todos los que vengan a robar van a irse sin ropa. Esta vez lo largamos, pero la próxima no sabemos”.
El sospechoso fue finalmente liberado por los mismos vecinos, sin que la Policía de Buenos Aires interviniera en el incidente. El caso refleja la creciente frustración de la población ante la inseguridad y la percepción de impunidad, llevando a algunos a tomar medidas extremas.
Mientras algunos aplauden la acción como un mensaje disuasorio para los delincuentes, otros cuestionan la violación de los derechos humanos del acusado.