Guatemala Fashion Week abrió oficialmente sus puertas con una pasarela cargada de emoción, belleza y nostalgia, encabezada por el influyente diseñador internacional Michael Costello, quien convirtió el escenario de Ciudad Cayalá en el epicentro del glamour y la moda.
Desde el primer paso sobre la pasarela, el público entendió que esta no sería una apertura más: sería una historia contada en siluetas, texturas y movimiento a cargo del diseñador estadounidense.
La colección presentada por Costello, confeccionada especialmente para esta edición de GTFW2025, emanó la esencia de su vida, su familia y los íconos que despertaron su deseo de crear.

Inspirado en las mujeres que marcaron su infancia, en la energía libre y audaz del Studio 54 y en figuras eternas como Bianca Jagger, Grace Jones, Diane Von Furstenberg y Jackie Kennedy, Costello no solo mostró ropa, reveló recuerdos, emociones y la profunda sensibilidad que siempre ha guiado su mano. Cada prenda parecía narrar su propia historia. Cada paso, un recuerdo convertido en diseño.
El caftán: símbolo de identidad y libertad
El punto clave del desfile fueron los caftanes, piezas que para Michael Costello representan un acto de amor, empoderamiento y autenticidad. Para Guatemala, el destacado diseñador creó nuevos modelos que nacieron de telas seleccionadas en Milán, Barcelona, Pisa, Florencia y Madrid, materiales que él mismo describe como “tejidos que hablan”.

Al verlos fluir en pasarela, el público entendió por qué el caftán es su silueta icónica: porque envuelve, empodera y transforma. Permite que cada mujer, sin importar quién sea o de dónde venga, se sienta hermosa, invencible y profundamente ella misma.
El aplauso fue la confirmación de la alta calidad y técnica impecable del diseñador, y del reconocimiento a su trabajo y a su mensaje: la belleza real nace cuando una mujer se reconoce poderosa.

Una noche que celebró a Guatemala
La inauguración del GTFW2025 recordó que la moda también es cultura, pasión y orgullo. El ambiente vibró con la energía del público y la puesta en escena que entrelazó arte, música y luz para crear una experiencia inmersiva.
