Otra vez la técnica del deepfake impacta la vida de una persona. Esta vez fue el caso de una mujer coreana, quien en los últimos días su nombre se viralizó por ser una nueva víctima de la estafa digital que cada vez más va en aumento y preocupa mucho a las autoridades internacionales.
El fraude tuvo como protagonista principal a nada más y nada menos que Elon Musk. Con su rostro, los ciberdelincuentes convencieron a la víctima de invertir la cantidad de 70 millones de wones, el equivalente de 51 mil dólares, para que supuestamente en el futuro cercano pudiera disfrutar el doble o triple de lo invertido en ganancias por intereses.
Relato del engaño
Jeong Ji-sun, una joven procedente de Corea del Sur, informó haber quedado sorprendida cuando creyó que había iniciado contacto directo con el fundador de SpaceX. El falso Musk le habría mostrado su identificación y fotos de él en su fábrica de autos eléctricos y en la empresa aeroespacial, situación que no hizo dudar de la verdadera identidad del irreverente CEO sudafricano, así lo resaltó el portal de NDTV.
Tras una serie de charlas y de un obvio convencimiento, el estafador compartió un número de cuenta bancaria coreana, que supuestamente manejaba una oficina de él en Corea, y le contó que con gusto invertiría por ella una cantidad de dinero, con la promesa de generar importantes ganancias. Una vez que se confirmó la transacción de los 70 millones de wones, la cuenta del falso Musk desapareció al instante.
Problema mundial en ascenso descontrolado
Las estafas románticas digitales, conocidas también como estafas de confianza, han generado en Corea de 370 millones de wones en 2020, creciendo descontroladamente en el 2023, generando pérdidas de de 5.510 millones. Asimismo, datos oficiales del Foro Económico Mundial, advierten con gran preocupación que los fraudes con deepfakes crecen a un ritmo anual del 900%.