El descenso de las temperaturas, nuestra piel exige cuidados específicos, y los labios suelen ser los primeros en resentirlo. Entre ráfagas de viento, ambientes secos por la calefacción y una hidratación insuficiente, esta zona delicada se vuelve propensa a la resequedad, las grietas y pequeñas heridas que tardan en sanar.
Si tus labios pierdan suavidad y confort Glamour.mx cuenta cómo obtener resultados increíbles para tus labios, aunque a veces pasen desapercibidos, su estado influye en la expresión y el aspecto general del rostro.
Por eso, protegerlos y mantenerlos humectados es más que una cuestión estética, “es un hábito básico para sentirnos bien”:
Hidrátalos
Independientemente de la estación, la hidratación es la clave para unos labios sanos. En época de frío solemos sentir menos sed, pero el cuerpo sigue necesitando agua. Consumir alrededor de dos litros al día contribuye a que la piel “incluidos los labios”, se mantenga firme, humectada y en buen estado.
Ten a la mano un bálsamo
El bálsamo labial será tu mejor aliado para resguardar la piel de los labios frente al aire seco y el frío. Elige opciones con ingredientes nutritivos como mantecas, cera de abeja y aceites naturales “como el de coco o almendra” y, si es posible, que también incluyan protección solar.

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Exfoliante
Exfoliar los labios una vez por semana permite retirar células muertas y facilita que los productos hidratantes actúen de manera más efectiva. Puedes optar por un exfoliante suave diseñado para esta zona o preparar uno casero mezclando azúcar con miel o aceite de coco. Aplícalo con movimientos circulares muy ligeros, sin ejercer presión, y enjuaga con agua tibia.

Evita humedecer los labios con saliva
Aunque parezca que al hacerlo los alivias, en realidad las enzimas presentes en la saliva irritan la piel y aumentan la resequedad. Cada vez que sientas la tentación de lamerlos, recurre mejor a un bálsamo labial y úsalo tantas veces como lo necesites para mantenerlos protegidos.
Ajusta tus rutinas diarias
Porque no solo los productos influyen en la salud de tus labios. Los espacios con calefacción tienden a secar el ambiente, lo que afecta directamente su hidratación; un humidificador puede ayudarte a mantener el aire más húmedo.
Además, procura alejarte del cigarrillo: fumar, deteriora la circulación y favorece la deshidratación, dejando los labios aún más vulnerables.
