El desperdicio de alimentos es un desafío ambiental y social que afecta directamente a millones de familias. Según el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, en Colombia se pierden casi 10 millones de toneladas de comida cada año, una cifra alarmante que refleja malos hábitos de almacenamiento y consumo.
Expertos de mabe aseguran que una simple reorganización de la nevera puede hacer la diferencia. “Cada zona del refrigerador tiene una temperatura distinta, y conocerla permite conservar mejor los alimentos, evitar su deterioro y reducir pérdidas innecesarias”, explica Lenín Moncada, gerente de producto de la categoría de refrigeración de la marca.
Errores más comunes en la refrigeración doméstica
Aunque parezcan detalles menores, ciertas prácticas cotidianas pueden acelerar el deterioro de los alimentos:
- Mezclar crudos con cocidos, lo que incrementa el riesgo de contaminación.
- Sobrecargar el refrigerador, impidiendo la correcta circulación del aire frío.
- Ignorar las fechas de caducidad o no organizar los productos por orden de consumo.
- Guardar alimentos sin tapa o envase adecuado, lo que provoca descomposición y malos olores.
Estos descuidos no solo generan pérdidas económicas, sino que también contribuyen al desperdicio masivo de alimentos en el país.
Cinco consejos para conservar sus alimentos por más tiempo
- Organice por zonas y temperaturas:
- Parte superior: sobras, lácteos y embutidos.
- Parte media: yogures, huevos y salsas abiertas.
- Parte baja: carnes y pescados crudos.
- Cajones: frutas y verduras, idealmente separadas.
- Puerta: bebidas, condimentos y productos menos perecederos.
- Utilice envases herméticos de vidrio o plástico para evitar fugas y olores.
- Cubra bien los alimentos con papel film, aluminio o tapas protectoras.
- Limpie la nevera periódicamente para prevenir bacterias y olores indeseados.
- Revise semanalmente el estado de sus productos y retire los vencidos o en mal estado.
Cuidar la comida es cuidar el planeta
Además de reducir el desperdicio, mantener una nevera bien organizada mejora la eficiencia energética y prolonga la vida útil del electrodoméstico. “Una buena gestión de los alimentos beneficia la economía familiar, la salud y el medioambiente”, subraya Moncada.
Evitar que los alimentos terminen en la basura no requiere grandes esfuerzos, sino hábitos conscientes y sostenibles que, aplicados en el hogar, pueden marcar una gran diferencia para todos.
