Cada primer martes de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma, una fecha clave para generar conciencia sobre esta enfermedad respiratoria crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. Este 6 de mayo, el mensaje es claro: el asma no debe limitar tu vida si se detecta a tiempo y se maneja correctamente.
El asma provoca inflamación y estrechamiento de las vías respiratorias, lo que puede causar dificultad para respirar, silbidos, tos y sensación de opresión en el pecho. Aunque no tiene cura, sí puede controlarse con el tratamiento adecuado y evitando los factores que desencadenan las crisis, como el polvo, el humo o ciertos alérgenos.
Especialistas recomiendan acudir al médico ante cualquier síntoma persistente. Un diagnóstico oportuno, el uso correcto de inhaladores y la educación del paciente son claves para mantener una buena calidad de vida. La automedicación o el abandono del tratamiento pueden poner en riesgo la salud respiratoria.
Este día sirve también para recordar la importancia de cuidar los pulmones y crear espacios libres de contaminación. Respirar bien es vivir mejor, y todos podemos hacer algo para apoyar a quienes viven con asma.