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Un domingo 20 de octubre de 2002, el otrora talentoso músico nacional Ricardo Andrade, dejó de existir en el Hospital General San Juan de Dios, lugar a donde fue llevado de emergencia tras haber sido herido de bala en Sanarate, El Progreso.
Han transcurrido 23 años desde aquella fatídica fecha que causó conmoción a la comunidad rockera del país, pero el nombre del líder de las agrupaciones “Stress” y “Ricardo Andrade y los Últimos Adictos“, quedó para la posteridad.
Lo anterior lo refrendan los colegas de Andrade y los fanáticos en general del rock guatemalteco que año con año recuerdan su trágica partida, pero que al mismo tiempo celebran su música y su legado.
Ricardo Andrade fue el fundador de Stress, banda clave del rock guatemalteco entre 1991 y 1998, con éxitos como “El norte”, “Ya no sé qué hacer conmigo”, “Elemento” y “Romper el silencio”. Tras la disolución del grupo, formó Los Últimos Adictos en 1998, consolidando una nueva etapa con temas como “Todo gira” y “En medio de esta fe”.
El 14 de octubre de 2002, Ricardo y el tecladista Gabriel Rivera fueron atacados a balazos en Sanarate. Rivera murió en el lugar y Andrade falleció el 20 de octubre, a causa de sus heridas y una infección respiratoria contraída en el hospital.
Cinco responsables fueron condenados por el crimen. Su legado musical sigue siendo fundamental para el rock nacional.