“Hoy descansan en este espacio sagrado diversas figuras queridas e importantes, aquí se respira un ambiente tranquilo y sereno”, Francisco Valencia, presidente de Eternity, Templo del Recuerdo, compartió con Publinews el origen, propósito y que figuras componen este innovador proyecto, que representa una nueva alternativa para preservar la memoria de los seres queridos dentro de un espacio sagrado y artístico.
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Figuras ilustres que reposan en las criptas
¿Y tu, ya lo sabías? A lo largo del tiempo, las criptas de la Catedral Metropolitana se convirtieron en el lugar de descanso final para estas destacadas figuras de la historia guatemalteca.
Entre ellas:
Ricardo Casanova y Estrada
Fue un destacado sacerdote guatemalteco. Además, recibió clases con de poesía con José Milla Vidaurre.
Rafael Carrera
Fue presidente en el Estado de Guatemala a partir de 1844.
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Serapio Cruz
Desempeñó un rol clave en la política nacional.
José María Reyna Barrios
Presidente de Guatemala desde 1892 hasta 1898, fue político y militar guatemalteco.
Además, dentro del establecimiento se encuentran resguardadas algunas piezas que soltó el sitio tras el terremoto de 1917 en la Ciudad de Guatemala.
Las criptas de la Catedral Metropolitana
“Más de 270 años”, impulsado por Eternity Templo del Recuerdo en colaboración con el Arzobispado de Santiago de Guatemala, este proyecto transforma un espacio de historia en un sitio de recogimiento y espiritualidad, renovado con profundo respeto.
Con más de 25 años de trayectoria en servicios funerarios en la región, Eternity respalda esta iniciativa que fusiona tradición e innovación. Su propósito es brindar un espacio que cumpla con las normas del Derecho Canónico respecto a la preservación de restos en sitios sagrados.
El Templo del Recuerdo, ubicado en la majestuosa Catedral Metropolitana, aunque fue concebido desde una perspectiva católica, está abierto también a personas de otras creencias, siempre que respeten el espacio, su significado espiritual y cultural.
En su fase inicial, el templo alberga 1,787 espacios columbarios, organizados cuidadosamente y numerados. Cada espacio puede estar destinado a una sola persona o a grupos familiares, con una capacidad máxima de hasta ocho miembros, lo que permite planificar con visión y cuidado el legado familiar.
Este proyecto no solo ofrece una opción digna para la conservación de cenizas, sino que también busca preservar la antropología, estética y espiritualidad que representa la Catedral como patrimonio cultural y religioso del país.
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