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El mundo del espectáculo en Estados Unidos se encuentra en estado de shock tras la trágica muerte del aclamado director y actor Rob Reiner, de 78 años, y su esposa, la fotógrafa Michele Reiner , de 68. La pareja fue hallada sin vida en su residencia en el lujoso barrio de Brentwood, Los Ángeles, el pasado domingo por la tarde, con lesiones que, según reportes policiales, son compatibles con apuñalamiento.
La conmoción se intensificó este lunes con la noticia de la detención de Nick Reiner, el hijo mediano del matrimonio, como presunto sospechoso del doble homicidio. Nick, de 32 años, fue arrestado la noche del domingo e ingresó en la cárcel del condado de Los Ángeles, donde permanece bajo custodia con una fianza fijada en cuatro millones de dólares, según confirman registros penitenciarios y diversos medios estadounidenses como TMZ, People y Los Angeles Times.
Los reportes iniciales indicaron que fue una de las hijas de los Reiner quien encontró los cuerpos y alertó a las autoridades. El Los Angeles Times señala que no se encontraron signos de ingreso forzado en la vivienda, sugiriendo que las víctimas conocían a su agresor.
Nick Reiner había hablado públicamente en el pasado sobre sus batallas contra la adicción a las drogas y los períodos de inestabilidad, incluyendo etapas en las que vivió en la calle. Aunque había retomado el contacto con su familia en los últimos años, este historial añade un sombrío trasfondo a la dolorosa situación.
Rob Reiner, una figura emblemática de Hollywood, es conocido por dirigir clásicos como Cuando Harry encontró a Sally, La princesa prometida y Misery. La pérdida del cineasta y su esposa ha provocado una ola de mensajes de condolencia por parte de personalidades del arte, la política y la cultura.
Las autoridades del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) continúan con la investigación para esclarecer los detalles de este trágico suceso.