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Capturan a familia acusada de asesinar y ocultar el cuerpo de su propia pariente

Todos son requeridos por el Juzgado de Femicidio de Quetzaltenango por el delito de obstaculización a la acción penal.

El caso sigue bajo investigación, mientras los capturados enfrentan el proceso penal correspondiente. Foto: PNC
Captura El caso sigue bajo investigación, mientras los capturados enfrentan el proceso penal correspondiente. Foto: PNC

Cinco personas, entre ellas hermanas y sobrinos de la víctima, fueron capturadas por su presunta implicación en la muerte violenta de una mujer ocurrida el pasado 30 de septiembre en la aldea Los Pocitos, Sibilia, según informó la Policía Nacional Civil (PNC).

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Las detenciones se realizaron tras siete allanamientos coordinados por agentes de la División Especializada en Investigación Criminal (DEIC) y la Fiscalía de Delitos Contra el Femicidio, en los municipios de Sibilia y San Carlos Sija, Quetzaltenango.

Los capturados fueron identificados como:

  • Paula “N”, de 65 años
  • Odilia “N”, de 43 años
  • Rodriga “N”, de 49 años
  • Thelma “N”, de 50 años

Osvaldo “N”, de 33 años (capturado en un centro médico alegando problemas de salud)

Las tres primeras son hermanas de la víctima, mientras que Thelma y Osvaldo son sus sobrinos. Todos son requeridos por el Juzgado de Femicidio de Quetzaltenango por el delito de obstaculización a la acción penal.

El caso sigue bajo investigación, mientras los capturados enfrentan el proceso penal correspondiente. Foto: PNC
Captura El caso sigue bajo investigación, mientras los capturados enfrentan el proceso penal correspondiente. Foto: PNC

Conflicto familiar habría motivado el crimen

De acuerdo con la investigación preliminar, el 30 de septiembre, la víctima, una mujer de 49 años, fue atacada con arma blanca presuntamente por sus propios familiares, tras un conflicto intrafamiliar.

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Posteriormente, los implicados intentaron encubrir el hecho al trasladar a la víctima a un centro asistencial, donde aseguraron que había muerto por un paro cardiaco.

Sin embargo, el personal médico constató que ya no presentaba signos vitales y que las lesiones no coincidían con la versión proporcionada.

Pese a ello, los familiares retiraron el cuerpo por la fuerza, sin esperar el procedimiento legal correspondiente, y lo sepultaron sin autorización judicial tras velarlo en su vivienda.

En tanto, el caso continúa en proceso de investigación por parte del Ministerio Público.

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