El anuncio de la intervención de la Parroquia de Candelaria, hecho por el arzobispo metropolitano Gonzalo de Villa, ha generado diversas reacciones entre los guatemaltecos, particularmente entre los fieles católicos y cargadores que participan cada año en las actividades religiosas de Semana Santa.
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En redes sociales, muchos usuarios expresaron su sorpresa ante la confirmación de que la iglesia ya se encuentra bajo investigación por presuntos actos de corrupción en la asignación y venta de turnos.
Otros, sin embargo, aseguraron que era algo que “ya se sabía”, refiriéndose a rumores previos sobre malos manejos administrativos.
Reacciones divididas
Algunos cargadores pidieron que la medida sirva para sanear las prácticas dentro de las hermandades y devolver la confianza a los devotos.
Otros usuarios solicitaron que la intervención no se limite a Candelaria, sino que se amplíe a otros templos y cofradías donde también han existido señalamientos de irregularidades.
También hubo quienes mostraron su molestia, al considerar que el anuncio se hace en un momento delicado para la Iglesia y puede afectar la fe de los feligreses.
Contexto
El sábado, el arzobispo De Villa confirmó que Candelaria ya está intervenida y aseguró que habrá resultados pronto:“La investigación está, yo digo que pronto veremos resultados. El mensaje es que sean fieles a la Virgen y no sean mañosos”, expresó.
El pronunciamiento del jerarca católico ha abierto un debate no solo religioso, sino también social, sobre la necesidad de mayor transparencia y fiscalización en las hermandades y cofradías que administran las tradiciones religiosas más importantes del país.